Esta crisis es quizás la peor de nuestra historia. No sólo por la magnitud del deterioro, que ya es bastante, sino porque esta ocurriendo sin necesidad. Es una crisis inducida, por la ideología, por la ignorancia o por las dos, el resultado es igual. Ver la situación en la que se encuentra el país da rabia, frustración, asombro, miedo, pero sobre todo, mucha tristeza.
Venezuela sin medicinas. Con la infraestructura en el piso. Con la inflación más alta del mundo. Sin billetes ni monedas para pagar. Con escasez galopante. Mendigando una caja de comida del gobierno que puede o no puede llegar y de la que dependen familias completas que no pueden protestar a riesgo de perder lo que les dan. Y entonces entiendes a los que se fueron y a los que se van. Primero lo hicieron muchos de los que más tenían. Llevaron sus familias y patrimonios lejos para protegerlos de lo que temían que pasaría y pasó. La pulverización del valor de sus inversiones en Venezuela.
Después se fueron muchos de los más educados y formados. El país se les volvió hostil y cavernícola. Su desarrollo profesional estaba comprometido. Mientras la tecnología, la ciencia, la medicina, la educación avanzaba en el mundo a pasos agigantados, en un mundo globalizado, su país retrocedía hacia una primitivización inimaginable en el siglo XXI. En un focus group nos decían: *“Venezuela es Macondo. Y Macondo es bello y sabroso, pero ahí no se puede vivir”. Se fueron entonces los doctores más preparados… Y los más jóvenes. Los ingenieros más audaces… Y los más jóvenes. Se fueron los economistas más internacionales… Y los más jóvenes, los administradores, los periodistas, los músicos (incluyendo los cuatristas), siempre los más dispuestos a asumir riesgos… Y los más jóvenes.
Y entonces comenzó lo que tenía que comenzar. Se están yendo los demás. Los que no tienen patrimonio que perder, pero si familias que mantener, en el medio de una hiperinflación espantosa que no saben como enfrentar ni entender. Es María sin compañía. Es Richard para Panamá. Es Linda para Madrid, Juan para Bogotá, Francisquito para Quito y Johnny para donde lo deje el autobús rumbo a Lima.
Y las despedidas de cada día ponen esa tristeza en el alma y en el corazón de la población que se queda y la que se va y deja el país más prometedor de América Latina, convertido en fábricas moribundas, constructoras en terapia intensiva, medios de comunicación con bombonas de oxígeno, colegios sin maestros, universidades sin PhD’s, ni internet, hospitales sin especialistas, teatros sin artistas… Pueblos, calles y casas muertas.
Y ¿saben qué? Que nadie puede parar este desangre con discursitos, amenazas, prohibiciones, ni mensajitos de autoayuda. Sólo logrando que la población entienda el reto: participar en todos los tableros para defender el regreso a la racionalidad económica y a la democracia real. Unirnos alrededor de un ideal y de un sueño y articularnos para lograrlo. Sólo así podremos poner el torniquete, operar, coser la herida y volver a empezar. ¿Qué cuál es la palabra mágica? La de siempre: Unión, y todo aquello y aquellos que la estimulen serán la llave del éxito…y viceversa”.
Escribí esto antes de las sanciones, con lo que no tengo que explicar que en mi opinión, la crisis que vivimos es responsabilidad exclusiva de la revolución y no la estrategia sancionatoria. Pero eso no elimina el problema que nos preocupa: las sanciones generales, económicas, financieras y petroleras (distinto a las personales), en realidad no ayudan a resolver el problema, como no lo hicieron en Cuba, Zimbabue, Korea, Siria e Iran y, en cambio, amplifican la crisis ya existente para la gente que todavía vive aquí… y que a este ritmo, será cada vez menos.
@luisvicenteleon
¿Te gustó este artículo? ¿Quieres recibir notificaciones en tu correo sobre este tema?
¿Quieres emigrar?
Postulate a las ofertas de trabajo disponibles en las mejores ciudades del mundo donde mudarte a vivir y trabajar, visita:
The Best Cities to Live and Work
Comparte en tus redes sociales:
Te recomendamos leer los siguientes contenidos relacionados:
Harina precocida y otros rubros, por Isaías MárquezNominado Maestro de Sombras como el mejor libro de comunicación política de 2024
La vuelta al nuevo curso político
Las elecciones estadounidenses bajo la sombra del intento de asesinato contra Trump,por Isidoros Karderinis
Miranda en la Independencia de EEUU por Isaías A. Márquez Díaz
EL VERANO POLÍTICO más allá del descanso por Isaac M. Hernández Álvarez
A costa de Venezuela, Guyana ofertante clave mundial de petróleo
Producción agropecuaria y combustible, por Isaías Márquez
Arroz, Extensión de siembra, lluvias y combustible por Isaías Márquez
Isaac M. Hernández Álvarez presenta la trilogía literaria MAESTRO DE SOMBRAS
Opciones para usuarios:
» Mide tu Velocidad de Internet aquí» Precio del Petróleo y otros Commodities:
» Precio del BITCOIN »
» Precio del DÓLAR
» Calculadora PayPal »
» Consultar el Horóscopo Diario »
» Pronóstico del Tiempo
» Cronograma de Pensiones IVSS 2024
» Buscar Noticias o Artículos
Sigue leyendo los temas más populares: