El gran hombre ofensivo del cotejo fue el primer bate, Marwin González, quien en esta oportunidad ligó par de anotadas y pareja de remolques con un doblete incorporado. A su vez, José Castillo agregó una empujada y la figura de Lobatón también relució, tras conectar par de tubeyotes. Bubba Bell tampoco se quedó atrás, pues engomó una y pasó por la registradora. En definitiva, a excepción de Daniel Mayora, todos los Leones añadieron al menos un indiscutible.
Respecto al pitcheo, Sam Narron conquistó su primer laurel del torneo, completando cinco tramos, donde toleró tres imparables, todos extrabases, cuyo daño se resumió en par de carreras permitidas y quienes se lo estacaron fueron: Frank Díaz, Andrew Brown y el bigleaguer de los Nacionales de Washington, Alberto González. Seguidamente, las actuaciones de los relevistas Steven Edlefsen, Víctor Gárate y Darwin Cubillán impidieron que Margarita montara un ataque verdaderamente significativo.
Por su parte, el relevo de Margarita se desplomó a diferencia de encuentros pasados, donde difícilmente le fabricaban una cantidad amplia de anotaciones. Alberto Bastardo apenas pudo sumar un tercio de labor, pues Caracas le hizo dos rayitas y le dio tres hits. Mauro Zárate siguió por Bastardo, pero también fue víctima con dos carerras más. Sin discusión alguna, el mejor fue Jhonathan Ramos, cuyos numeritos no dejan de ser buenos y él junto a Luque evitaron que el conjunto capitalino aumentara la diferencia. Fue un juego sumamente hegemónico.LA JUGADA CLAVE
Abriendo el cuarto capítulo, Marwin González disparó un sólido inatrapable a terrenos del bosque central, cuyo cohete sirvió para remolcar a sus compañeros Raúl Padrón y Bubba Bell, desde tercera y segunda, respectivamente. Tal batazo sirvió para que Caracas aumentara su ventaja a una cantidad considerable, pues se logró colocar las acciones 5×1.
Confianza plena en Marwin
Dave Hudgens opinó que el infielder Marwin González tiene capacidad para jugar en cualquier posición del cuadro, “pues rinde donde lo pongan”. A Marwin se le vio muy activo cubriendo el campo corto, a pesar de un nuevo error.
ASÍ LO VIVIMOS
Definitivamente todo se le dio al Caracas en este compromiso frente a la tropa neoespartana. Vinieron con las mismas energías que tuvieron en los últimos tramos del compromiso del sábado ante La Guaira, donde nuevamente aquellos batazos de más de una esquina fueron letales al combinarlos con las pífias defensivas de Bravos, logrando tener una cómoda diferencia.
El bullpen también hizo su trabajo, aunque contando con las nueve anotaciones, no hubo presión como en anteriores cotejos, donde los momentos de tensión han conspirado frente a la confianza. Frente a todo esto hay que decir que el Caracas sigue siendo la novena más bateadora de la presente zafra y vale la pena afirmar que es un equipo “dominguero”, pues gana tranquilamente sus encuentros del séptimo día de la semana y, además en la cueva del león.
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