En un recorrido que realizó el equipo de Últimas Noticias por los principales establecimientos de la ciudad, se constató que un Samsung Galaxy Mini S4 cuesta Bs 39.799, un LG modelo G2 está en Bs 34.499, y un Alcatel C5 asciende a Bs 18.499.
Móviles de otras marcas menos conocidas por los compradores se sitúan entre Bs 4 mil y Bs 11 mil.
José Gregorio Sánchez, encargado de un centro Movistar del casco central, refirió que el suministro de teléfonos liberados no es suficiente para satisfacer la demanda.
“En vista de que el Gobierno no facilita la adquisición de divisas, tenemos que buscar otras formas de importar la mercancía y los costos se elevan”, explicó.
Diego González, encargado de un local, apuntó que ahora sólo ofrecen equipos de marcas desconocidas.
Fernando Echenique, vendedor de una tienda, detalló que casi no tienen productos para ofrecer. “Los equipos solo se ven en las promociones de la televisión, pero la realidad es otra”, aseguró.
Sergio Montalbán, comprador, señaló que lleva tres meses en busca de un teléfono a precio justo. “Cuando uno ve el realero que cuestan es fácil darse cuenta de la situación económica del país”, añadió.
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