«Puedo tranquilizar a nuestros aficionados, no tenemos ninguna intención de permitir que se debilite el equipo. Queremos reforzar al equipo actual y no minarlo», dijo el hombre de negocios, en declaraciones recogidas por la página de Internet de los ‘Reds’.
Henry, presidente del consorcio estadounidense New England Sports Ventures (NESV), compró el Liverpool por 300 millones de libras (unos 345 millones de euros) hace dos semanas.
«Estas historias sobre nuestros mejores jugadores que iban a dejar el club son destructivas e injustificadas, pero somos conscientes de que las especulaciones son habituales», adujo el flamante propietario del Liverpool.
El club ocupa una de las posiciones de descenso en la Premier League, con sólo dos victorias en los nueve partidos que se llevan disputados en la presente edición del campeonato.