La necesidad de un servicio de estas características está a la orden del día: reparar el ordenador de alguien sin tener que instalarle programas adicionales o usar software en ordenadores del trabajo o la universidad que no lo permiten son algunas de las muchas situaciones en las que LiberKey puede ser de ayuda.
Su funcionamiento es terriblemente simple. La primera vez que arranquemos el programa tras su instalación nos aparecerá un asistente que descargará uno de los paquetes de herramientas portables en el dispositivo USB que hayamos conectado al equipo, aunque siempre podremos realizar nuestra propia selección de entre el enorme catálogo disponible. Los tres paquetes básicos son:
- Basic suite: 247MB, 14 programas.
- Standard suite: 558MB, 85 programas.
- Ultimate suite: 809MB, 149 programas.
El contenido del lote incluye todo tipo de herramientas organizadas por categorías, en todos los casos gratuitas, legales y oficiales (o al menos, con el beneplácito de sus desarrolladores originales): CCleaner, Paint.NET, Recuva, Audacity, 7-Zip, FileZilla, Media Player Classic, uTorrent, TeamViewer… prácticamente todo el software freeware que podemos necesitar y que cubrirá cualquier neceisdad.
Una vez instalados los programas en la unidad USB, si accedemos a la misma, todos los archivos de los programas estarán ocultos, de forma que el único modo de lanzar las herramientas instaladas será desde el propio menú desplegable de LiberKeydesde su icono en la barra de notificaciones. Ahí podremos borrar o instalar programas nuevos, así como acceder a una serie de funcionalidades adicionales.
LiberKey genera una carpeta de ‘Mis Documentos’ totalmente ajena a la del propio equipo donde estamos trabajando. También podremos asociar todos los formatos de archivo utilizados por los programas instalados de forma temporal, e incluso crear accesos directos en el escritorio que podremos desvanecer una vez hayamos finalizado nuestro trabajo.Todo con la intención de no dejar rastro una vez desconectemos nuestro pendrive.