Este extraño comportamiento recientemente descubierto en simios salvajes del África Occidental recuerda a los mojones humanos. Amontonan las piedras bajo los árboles y luego las arrojan contra ellos.
Los chimpancés, nuestros parientes vivos más cercanos, suelen utilizar herramientas para alcanzar o consumir , como palos para pescar termitas u hormigas o extraer , o piedras para partir . Eso es algo que los científicos conocen desde hace tiempo, pero ahora investigadores del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva en Leipzig (Alemania) han descubierto un extraño comportamiento que jamás habían visto antes. Los chimpancés de África Occidental acumulan piedras bajo los árboles que luego arrojan contra ellos. Los cúmulos se parecen a los mojones humanos, como los cairns, pequeños montículos de forma cónica en los que se coloca una piedra sobre otra. El motivo resulta un misterio, pero los autores de este estudio creen que puede tener algunos culturales, una tradición restringida solo a algunas poblaciones.
La investigación forma parte de un programa panafricano para el estudio del chimpancé (PANAF), dedicado a entender mejor los factores ecológicos y evolutivos de la diversificación del comportamiento de estos animales. Siguiendo un protocolo estandarizado, los investigadores han recopilado datos sobre el comportamiento de los chimpancés, su demografía y disponibilidad de recursos desde 2010 en 39 lugares diferentes a través de África. Dado que los chimpancés no estaban habituados a la presencia humana en los sitios analizados, los investigadores utilizaron una amplia gama de métodos de muestreo no invasivos, incluyendo cámaras remotas.
Gritaban a la vez
Los investigadores descubrieron montones de piedras apiladas junto a los árboles en cuatro sitios de África Occidental. En Guinea Bissau, registraron algunos vídeos impresionantes que confirmaron la sospecha de que los chimpancés eran los responsables de las pilas de piedras y estaban visitando regularmente estos árboles. «Las cámaras filmaron cómo los chimpancés recogían piedras de al lado o de dentro de los árboles y luego las tiraban contra esos mismos árboles, mientras emitían gritos y vocalizaciones», dice Ammie Kalan, investigadora del Max Planck.
Según los científicos, estas actuaciones parecen ser independientes de cualquier contexto de alimentación. Además de utilizar las piedras y otros elementos para lograr comida, en ocasiones los chimpancés tiran ramas y piedras para solicitar relaciones sexuales de las hembras. ¿Puede ser la explicación? Resulta poco probable, ya que en este caso, aunque el comportamiento era sobre todo habitual en los machos, las cámaras también captaron a hembras o crías haciendo lo mismo.
«Este estudio informa de un nuevo comportamiento de los chimpancés no conocido previamente», subraya Christophe Boesch, director del Departamento de Primatología en el Instituto Max Planck, quien tiene su propia interpretación de los hechos. A su juicio, es probable que el extraño comportamiento de los chimpancés tenga algún motivo cultural, ya que la acumulación de piedras no parece estar ligada a la abundancia de las mismas o a la disponibilidad de árboles en la zona.
Los autores también sugieren que este comportamiento recién descubierto podría arrojar alguna luz sobre el origen de los lugares rituales en la evolución de los homínidos. Resulta de lo más intrigante.