Las lluvias y la ayuda de otros países han contribuido a aminorar la crisis energética que atraviesa Venezuela

   Las lluvias que cayeron estos días sobre gran parte del territorio venezolano y la ayuda de países como Brasil, Argentina y Cuba han contribuido a aminorar la crisis energética que atraviesa Venezuela, informó el jueves el ministro de Energía Alí Rodríguez.

«Nunca ha habido una propuesta consistente. Pero siempre estamos abiertos a cualquier negociación», aseguró Rodríguez en relación a la venta de energía por parte de Colombia.

«Era un precio muy alto» el solicitado por Colombia, añadió, sin dar más detalles, explicando que la oferta que conocieron extraoficialmente era sólo para la venta de 40 megavatios (MW) y no 140 MW como se conoció anteriormente, y que era además la cantidad que Venezuela compraba a Colombia hasta el año pasado.

Rodríguez aseguró además que «está conjurado» el peligro de colapso energético, en parte gracias a las lluvias recientes.

Las precipitaciones permitieron mejorar los niveles del embalse del Guri (sur), responsable del 73% del suministro eléctrico del país, cuyos niveles se acercaban a la zona de emergencia por la fuerte sequía que afectó a Venezuela los últimos meses.

«Ese peligro está conjurado. Va a haber energía eléctrica para asegurar el crecimiento industrial del país», señaló. «La situación de emergencia tiende a desaparecer aún cuando podamos mantener algunas medidas», añadió.

El gobierno espera que hacia junio se puedan levantar las medidas contenidas en un decreto de emergencia eléctrico que fue prorrogado la semana pasada por otros 60 días por el presidente Hugo Chávez.

Ese decreto establece, entre otros, cortes programados en el suministro eléctrico y multas a empresas y usuarios particulares que no reduzcan su consumo.

De acuerdo a estimaciones oficiales, este año se sumarán 5.700 MW al sistema energético venezolano para totalizar una capacidad instalada de 31.000 MW.

De este potencial eléctrico, sólo están disponibles por ahora unos 16.500 MW, cifra que corresponde a la generación real, mientras que la demanda de electricidad es unos 1.000 MW superior y crece cada año, según cifras oficiales.

Los expertos cuestionan estos planes del gobierno y subrayan que es necesaria una millonaria inversión para sacar a flote un sistema eléctrico colapsado.

mp / Reporte360