Cinta fantástica con clara vocación palomitera y evidente target teen y familiar, “El aprendiz de brujo” encuentra su inspiración original en el poema que Johann Wolfgang von Goethe escribió en 1797 para la balada “Der Zauberlehrling”, que a su vez dio pie a una composición sinfónica de Paul Dukas que, a su vez, motivó uno de los pasajes más recordados del musical animado de Disney “Fantasía” (James Algar y Samuel Armstrong, 1940): el poema, de tan sólo 14 estrofas, narraba la historia de un aprendiz de brujo que decide probar sus artes a espaldas de su maestro; el aprendiz consigue dar vida a una escoba, pero pronto esta escapa a su control y él intenta detenerla partiéndola con un hacha, lo que provoca que las escobas se multipliquen y desaten el caos, hasta que la vuelta del maestro restaura el orden.
Lejos de aquella premisa, “El aprendiz de brujo” busca ser cine fantástico y de aventuras sin complejos, con Jerry Bruckheimer como padrino (una vez más) y Nicolas Cage (“Señales del futuro”, “Teniente corrupto”), Jay Baruchel (“Tropic Thunder: ¡Una guerra muy perra!”), y Alfred Molina (“Prince of Persia: Las Arenas del Tiempo”) como protagonistas de una función en la que también participan Monica Bellucci (“La vida privada de Pippa Lee”) y Teresa Palmer (“Más allá de los sueños [Bedtime stories]“). Dirige Jon Turteltaub, quien ya trabajara con Cage en “La búsqueda” (2004) y su secuela.
“El aprendiz de brujo” se estrena el 3 de septiembre