A juicio de Ramírez, los puntos abordados por el informe contienen una “direccionalidad”.
Expresó que esto “forma parte del discurso de sectores de oposición venezolano” y generaliza sobre hechos aislados, con el propósito de “arribar a una conclusión que es que el Estado venezolano atenta contra la democracia y los derechos humanos”.
En este orden de ideas, indicó que ya había denunciado que esto forma parte de acciones orientadas a restarle credibilidad a las instituciones del país.
De manera enfática dijo que la Defensoría del Pueblo “no reconoce a la CIDH como una institución imparcial… y eso nos llena de preocupación”.
En tal sentido, hizo mención a el homicidio ocurrido el día de ayer en Honduras, donde fue asesinada una integrante del frente hondureño. Ramírez afirmó que “la CIDH no trabaja de forma eficaz en Latinoamérica para solventar este tipo de casos”.
Expresó que el día de ayer se hizo un resumen ejecutivo con el equipo de servicio jurídico y la oficina de análisis, dijo que en los últimos años se han ido promoviendo los derechos humanos.
La funcionaria destacó que “hay países que triplican las cifras de torturas y desapariciones y ellos no han hecho mérito para que se haga un informe”.
“¿Que propósito tendrá el informe que sale ayer de la CIDH en el marco de un proceso electoral?” se preguntó Ramírez.
Señaló que “este informe dice entre líneas que en nuestro país cesó la democracia”.