En cuatro años y medio, el Poder Legislativo aún no finiquita la Ley Orgánica del Trabajo y se mantiene en mora con la Ley marco de Seguridad Social; sin embargo, ya ha aprobado tres informes sobre los peligros que se ciernen contra el líder de la revolución. El primero llegó el 2 de diciembre de 2008 bajo el título: Informe que presenta la Comisión Especial para Investigar la conspiración y organización del golpe de Estado y magnicidio en contra del comandante presidente de la República Bolivariana de Venezuela, Hugo Chávez.
En menos de un año, el 13 de octubre de 2009, la Cámara volvió a abordar el asunto y produjo otro documento: Informe que presenta la Comisión Especial que investiga la conspiración y organización del golpe de Estado y magnicidio en contra del comandante presidente Hugo Chávez, sobre las declaraciones del ex director de Informática del Departamento Administrativo de Seguridad de Colombia, Rafael García.
Además, en junio pasado dieron el visto bueno a otro documento «sobre el financiamiento proveniente del exterior a periodistas y partidos políticos de la oposición venezolana».
En este mismo período la AN ha sancionado cinco informes de la Comisión de Contraloría. Dos de ellos en 2008 y dirigidos contra sendos adversarios de la revolución: los ex gobernadores de Zulia, Manuel Rosales, y Yaracuy, Carlos Giménez.
Por el jefe
La aplanadora roja siempre ha estado presta para respaldar al jefe de Estado. El balance de los acuerdos ratificados así lo demuestra. En 2006 rechazaron que al mandatario le tacharan de antisemita y apoyaron su decisión de denunciar el Acuerdo de Cartagena.
Al año siguiente, la AN chavista suscribió un acuerdo para denunciar un «plan desestabilizador» y otro para secundar la determinación de no renovarle la concesión a Radio Caracas Televisión.
La «propuesta de paz» de Chávez para Colombia fue avalada por la plenaria el 17 de enero de 2008. Dos meses después aplaudió la política del presidente con respecto a Bogotá, en julio se opuso a una «campaña difamatoria» lanzada por el director de Interpol contra el dignatario y en junio apuntaló las medidas económicas dictadas por Miraflores.
El «acuerdo para respaldar y felicitar al ciudadano Presidente por el éxito de su gira en Europa» lo firmaron en agosto de 2008. Luego, celebraron la expulsión de José Manuel Vivanco, coordinador de la ONG Human Rights Watch.
En 2009 mantuvieron la tónica: se pronunciaron a favor de romper las relaciones con Israel, cuestionaron las críticas lanzadas por la Cámara de Diputados de Chile al jefe de Estado y, junto con Miraflores, objetaron el pacto militar entre Colombia y Estados Unidos.
La fidelidad a Chávez también ha marcado 2010: apuntaló la respuesta al ex presidente Álvaro Uribe, las nuevas medidas económicas y la aplicación de la Ley Resorte, festejaron el undécimo aniversario de la toma de posesión del Presidente y fustigaron al cardenal.