En ese sentido, aseguró que el fenómeno se repite, “basta con recordar lo sucedido con el triunfo electoral de Hugo Chávez en 1998, la reacción que provoco en sectores de la sociedad más allá de los partidos. En cuanto Chávez tomó posesión de la presidencia comenzaron a actuar esos factores, no fueron los partidos puntofijistas derrotados políticamente los que asumieron la conducción de los que se oponían a la nueva etapa, fue ese conjunto amorfo de factores contrarios a cualquier demostración democrática, comenzando por los propios partidos, el que paso a controla lucha contra el proceso bolivariano recién iniciado”.
“Ese movimiento opuesto a lo que chávez representaba tuvo desde el principio contenidos antidemocráticos y en el fondo representaba la irracionalidad de un fascismo criollo incipiente negador de cualquier posibilidad transformadora”, agerego Rangel.
Asimismo, señaló que la oposición venezolana trasmite mensajes a “revolver lo más sórdido en una sociedad, descalifinacdo a la instituciones y a quienes las dirigen”, con el objetivo es sembrar dudas en el proceso electoral atacando al Consejo Nacional Electoral (CNE).