“¿Cómo reaccionar frente a un cuadro que exhibe al país como el más corrupto del mundo, como el lugar donde hay más delitos y nada vale la vida? ¿Es acaso cierta esa imagen? No, no lo es y lo afirmo de manera rotunda”, aseveró el periodista.
En este orden de ideas, comentó que el panorama que se vive en la nación es completamente diferente: “Venezuela está plena de valores y es capaz de adelantar, de manera incruenta, cambios sociales que en otros países han tenido un costo inmenso. El pueblo venezolano es trabajador, pacífico, democrático, ha sido capaz de adelantar políticas audaces pagando un tributo mínimo, social y humano. Ha convertido el sufragio en instrumento idóneo para avanzar. Pero sería largo enumerar éxitos sin negar, desde luego, que hay fallas, errores y vicios difíciles de erradicar”.
Por esto Rangel afirmó que el compromiso para este año es abrir el diálogo para trabajar por la paz. “Abrir las puertas al diálogo sin arrear banderas, ni renunciar lo que cada quien representa en el universo plural que es Venezuela, constituye el mandato que los electores depositaron en manos del liderazgo nacional, tanto el político como el económico, el social y el cultural”, sumó.
“Lo que ahora reclama la mayoría del pueblo no es otra cosa que trabajar por la paz, por el entendimiento, es el compromiso verdadero con ese pueblo que se niega a transitar los atajos de la violencia fratricida“, expresó.