Para el reconocido fotógrafo profesional Adolfredo Palencia, “La Catira de la 2” luce un 90% mujer, pese a su condición de transexual.
“Quien no sepa que nació siendo hombre, al ver una imagen de ella no podría percibir con seguridad que no es fémina, porque lo aparenta casi en su totalidad”, indicó.
Agregó que Lexiebeth, de 21 años, quien trabaja en la venta del sexo en la Circunvalación 2 (C-2) de Maracaibo, tiene “mucha mejor figura que otras mujeres de su edad”, a pesar de que su rostro todavía posee facciones que al observar con minuciosidad podrían hacer dudar de su género, como lo son la nariz ancha y el extremo grosor de los labios.
Aunado a ello, apuntó, otro factor que arroja señales de su género biológico es que parece cohibirse a la hora de tomarse ciertas fotografías, ya que siente que trata de ocultar sus genitales.
Palencia explicó que para lograr esto último, el fotógrafo debe emplear de manera eficaz la iluminación y utilizar la técnica de claroscuro, con la cual se puede disimular todo lo que la persona no quiere mostrar.
Desde la óptica fotográfica, resaltó Palencia, el cuerpo completo de Lexiebeth podría “explotarse” si bajara un poco de volumen, ya que sus características atraen a más de uno.
A modo personal, el especialista en fotografías de modelos, dijo: “Cada quien hace con su cuerpo lo que mejor le parezca, y si él decidió convertirse en mujer, bienvenido sea”.
Por otra parte, Jonathan Ríos, estilista profesional quien ha laborado con modelos en el Miss Zulia y Miss Venezuela, aseveró que a su juicio Lexiebeth se ve “99.9% mujer”.
“La he visto y se ve bastante bien en comparación con otras transexuales o mujeres biológicas”, expresó.
Al mismo tiempo, expuso una breve evaluación de la imagen de “La Catira” tras detallar varias imágenes de la entrevista con NAD.
“Por las fotos que he observado, emplea de forma correcta el maquillaje necesario para el día y para la noche, y sus labios no tienen necesidad de ser delineados para crear aumento en el volumen, a diferencia del de otras mujeres”, manifestó.
Como consejero en el mundo de la belleza precisó que las cejas de Lexiebeth deberían ser acercadas más hacia la nariz para profundizar su mirada y permitir que sea más expresiva. Además, añadió, la realización de ondas en su cabello enseñarían su lado más elegante y sofisticado.
Para Ríos, Lexiebeth “tiene un cuerpo muy perfecto”, y lo argumentó al explicar que los hombros, pantorrillas, espalda y manos delatan el género de las personas, pero esas partes en ella son muy femeninas.
Comentó que en orden para obtener una imagen mujeril, muchos transexuales se colocan los típicos implantes o inyecciones en diversas áreas de su físico, pero además acuden a alguno de los centenares de centros de estética que existen en la región para ejecutarse la depilación láser (método permanente) o depilación con cera (método temporal).
Ríos confesó “admirar” a Lexiebeth y demás transexuales por el “valor que tienen de cambiar su cuerpo y salir a la calle”, aunque él, admitió, “no sería capaz de hacer algo así”.
Opinan los zulianos
Arnoldo Coy, habitante de la urbanización San Miguel, opinó: “<La catira de la 2> engaña a cualquiera, el que no sepa que fue hombre no se da cuenta al verla, porque es muy bella y realmente parece mujer”.
Al norte de la ciudad, Jorge Zerpa, quien reside en la urbanización Mara Norte, dijo: “Se ve bien porque casi no se le nota la contextura de hombre. De hecho, tiene buen cuerpo pero no entiendo por qué prostituirse si ya logró lo que quería: verse y sentirse mujer. Sin embargo, esa es su vida y cada quien debe respetarla”.
En el bando femenino, Brezkely Martínez, habitante de la urbanización El Caujaro, en San Francisco, consideró: “Lexiebeth tiene un cuerpo estrambótico, exagerado, por lo que no entiendo por qué a todo el mundo le gusta y se impresiona por ella”.
A favor o en contra, cada quien tiene su propia opinión sobre “La Catira de la 2”, una transexual quien poco a poco se convirtió en una especie de ícono referencial de la Circunvalación 2 de Maracaibo.