Igualmente, manifestó que el más importante de esos cambios es “la transición del modelo capitalista a uno socialista, con rasgos propios como el respeto al pluralismo, la libertad, elecciones y la toma de decisiones por el movimiento popular”.
Rangel expresó que la oposición, que aspira a entrar al Poder Legislativo, no ha revaluado su capacidad democrática en las gobernaciones y alcaldías que obtuvo, sino que, por el contrario, los mandatarios regionales y locales adversarios concibieron su ejercicio en términos de enfrentar al Ejecutivo e “ignorar el mandato de la corresponsabilidad que consagra la Constitución”.
“Es decir, utilizaron los cargos como reductos para entrabar el funcionamiento institucional del país. ¿Se pretende lo mismo desde el escenario parlamentario? ¿Qué ocurriría si la representación popular es asumida con propósitos desestabilizadores y no como ejercicio democrático para fortalecer el Estado de Derecho?, señala.
“¿Se compite con la secreta intención de desconocer el resultado si es desfavorable? No es la primera vez que la oposición lo hace” agregó.
En cambio, recuerda que el chavismo respetó los resultados y se cuidó de no denunciar irregularidades donde perdió.
Destacó que lo que cuenta en este nuevo episodio de la transición de una a otra institucionalidad es la sinceridad de los protagonistas.
“Ni ventajismo ni trastadas de última hora. 18 millones de venezolanos con experiencia y voluntad de participar sufragarán dentro cuatro meses. Exigen a las partes lealtad a los principios y pulcritud en el comportamiento durante la campaña. Es a lo menos que se deben comprometer los líderes”, puntualizó.
rs / Reporte360