«No encuentro un modelo en otra película para una mujer que hable de esa forma tan dura y sea tan sexualmente agresiva como el personaje de Aniston, creo que es algo verdaderamente original en la cinta», dijo a Efe el director de la cinta, Seth Gordon.
El filme narra la historia de tres amigos, interpretados por Jason Bateman (Juno), Jason Sudeikis (Hall Pass) y Charlie Day (Salvando las distancias) que conspiran para matar a sus respectivos y horribles jefes, ya que piensan que si se intercambian a las víctimas nadie descubrirá su crimen.
Aunque el argumento recuerde a las premisas de Extraños en un tren (1951) de Alfred Hitchcock, a la que los propios personajes hacen referencia, tiene un desarrollo cómico y no podría ser más diferente del clásico del director inglés.
«Acepté dirigirla porque cuando leí el guión me reí tanto que se me saltaron las lágrimas y tenía que responder a eso», explicó su director, que añadió que «otras decisiones se pueden racionalizar, pero no hay discusión con algo que te afecta de esa forma».
Además de Aniston, los otros «jefes terribles» son Kevin Spacey (American Beauty), que interpreta un personaje «realmente hostil» en palabras del director, mientras que Colin Farrell (Alejandro Magno) interpreta a un incompetente que hereda la empresa de su padre.
Aniston, que deja de lado su imagen de buena chica forjada en la exitosa serie Friends y en diversas comedias románticas, explicó en la presentación de la película en Nueva York que no dudó en aceptar el papel. «No siempre quiero interpretar personajes con los que esté a salvo y fue una oportunidad magnífica», señaló.
«Solamente hacía mi trabajo, y fue bastante fácil», añadió la actriz sobre su lenguaje soez y actitud provocativa de su personaje.
En la cinta luce también un cambio de imagen, con una larga melena morena, ya que pretendía que el personaje «tuviera un aspecto muy diferente». Sin embargo, admite, «al principio el estudio no quería que apareciera morena en la película».
«Fue irresistible dirigirla, era la única persona que imaginé para el papel», explicó el director, quien dijo de Aniston que es «una gran profesional y se comprometió con la historia».
Además de elogiar la «dinámica estupenda» que lograron los demás actores, el director mencionó la estrecha colaboración que hubo entre él y Colin Farrell para dar forma al personaje de éste, basado en una persona real.
«El papel que interpreta está inspirado en el campeón de videojuegos Billy Mitchell, una persona bastante extrema que aparece en mi documental «The King of Kong: a fistful of quarters»», explicó Gordon.
«Vimos el documental para que construyera al personaje, para el que Farrell sugirió la calva y la barriga que luce en la película», añadió el director de la cinta.