Respecto a su adaptación al Barça, el centrocampista ha recordado que llegó con la liga empezada. «Todo significa un cambio, pero mis compañeros y el entrenador me hicieron sentir bien, estoy cómodo. Trato de aprender adaptando conceptos del juego y conociendo a los compañeros», ha explicado.
Mascherano ha señalado que, a diferencia de otros sistemas, en el Barçelona le piden que también participe en la elaboración del juego. «Acá, si bien me piden lo mismo en lo defensivo, es un sistema en el que también hay que tener participación en el juego, eso es lo que yo no estaba acostumbrado, es en lo que tengo que aprender, mejorar y automatizar», ha indicado.
El jugador argentino, que lleva unos dos meses en Barcelona, se ha mostrado sorprendido por el «hambre de objetivos» que tiene estos jugadores que «han ganado todo».
«Se trabaja en un gran ambiente, se vive con mucha alegría los entrenamientos y los partidos. Pero lo que más me ha sorprendido es el hambre de seguir teniendo objetivos, aquí no hay relajación, se nota que el hambre está intacta», ha destacado el argentino.
También ha tenido tiempo para hablar de su último equipo, el Liverpool inglés, que atraviesa una serie crisis institucional y deportiva.
«Lo veo con tristeza (al Liverpool), es un club que me dio muchísimo, donde tengo amigos, afectos y lamentablemente se encuentra en una situación rara y difícil. Pero con los jugadores que tienen y lo que es como institución, se va a levantar. Resulta extraño verlo en la situación que está hoy», ha opinado.
Si bien ha manifestado estar al tanto de lo sucedido el último fin de semana en la asamblea de compromisarios del Barcelona, que ha decidido encarar acciones por la vía civil contra la anterior directiva, Mascherano ha dicho que «el equipo debe mantenerse al margen de todo».
GM / REPORTE 360