Un grupo de ratas de laboratorio han obtenido un sexto sentido: La habilidad de detectar la luz infrarroja, parte del espectro electromagnético que normalmente es invisible para estos animales. Los roedores son parte de un experimento realizado en el Duke Center for Neuroengineering en Estados Unidos.
Para lograr esto, se le implantó a las ratas un detector de luz infrarroja a la parte del cerebro que procesa el sentido del tacto. Hasta ahora, el diseño de interfaces cerebro-máquina se había concentrado en devolverle a las personas una habilidad o función que hubiesen perdido por daños al sistema nervioso, pero esta es la primera vez que se agrega a un animal una habilidad nueva – un sexto sentido.
En un principio, se entrenó a las ratas a responder a luces en el espectro visible, haciendo que se acercaran a la luz para recibir una recompensa. Luego se encendió el detector de luz infrarroja implantado, lo que significó que cuando la rata se acercaba a la luz, se estimulaba su sentido del tacto. Esto es, mientras más se acercaran a la fuente de luz, sentirían más calor, mientras que más lejos sentirían frío.
Aparentemente las ratas al principio confundieron la sensación de la luz con tacto real, pero después de un mes comenzaron a utilizar la habilidad para detectar fuentes de luz infrarroja. El estudio además señala que la región del cerebro que procesa el tacto se adaptó para procesar las señales infrarrojas, sin afectar a la sensación normal de tacto de la rata. El estudio fue publicado en la revista científica Nature Communications.
Según los investigadores, aunque este estudio se enfocó en que las ratas pudieran detectar las fuentes de luz infrarroja, la tecnología también podría utilizarse para darles visión infrarroja completa a los animales, o para incluir sensibilidad a otras áreas del espectro electromagnético como ultrasonido, ondas de radio o cualquier otra cosa.
Link: Implant gives rats sixth sense for infrared light (Wired UK), fuente. fayerwayer