«Según la Organización Mundial de Aduanas, en Europa occidental la mayor parte de la cocaína entra por contrabando procedente de la República Bolivariana de Venezuela», indicó el órgano independiente dentro del sistema de la ONU que vigila el cumplimiento de los convenios internacionales sobre drogas.
La JIFE subraya que las incautaciones de cocaína han caído en Europa Occidental en 2008, pero se ha asentado la ruta por los Balcanes y Europa oriental, unas vías de acceso que antes sólo eran usadas para introducir ilegalmente el opio que llegaba de Asia.
«El creciente número de remesas de cocaína de América del Sur a países de Europa oriental muestran la tendencia relativamente nueva de este tráfico», asegura el informe.
La Jife subraya que África occidental sigue siendo utilizada como lugar de «almacenamiento y tránsito de la cocaína» hacia Europa, si bien se observó «una disminución del número de incautaciones de cocaína y de su volumen total».
El medio principal para transportar la cocaína de América Latina a Europa es el barco, y se especifica que fletes marítimos de esa droga procedente de Colombia y Ecuador tuvieron «como destino, principalmente Croacia, y en segundo lugar, los Países Bajos y Montenegro» en 2008.
La Junta explica que los «narcos» utilizan nuevos métodos para introducir la droga en Europa del Este, como demuestra la incautación de 164 kilogramos de cocaína líquida en Eslovaquia, embotellada y declarada como «vino tinto».
El consumo de cocaína disminuyó durante 2008 en España, Reino Unido, Alemania, Austria y Suiza, mientras que aumentó en Irlanda y Francia.
A nivel general se ha estabilizado o ha descendido el uso de cannabis, éxtasis y anfetaminas gracias a las campañas de prevención, aunque también se detectó en algunos países como Dinamarca, Reino Unido y España que los usuarios de esas drogas las reemplazaron por cocaína, sin aportar la JIFE más detalles.
Europa también sigue siendo el mayor mercado de resina de cannabis del mundo, y el mayor volumen total de incautación de esta sustancia se registró en España con 628 toneladas en 2008.
«Europa es la única región del mundo en la que entran por contrabando grandes cantidades de hierba de cannabis procedentes de otras regiones, como África o Asia», indica la JIFE.
En Europa Oriental la presencia de drogas derivadas de opiáceos, en su inmensa mayoría heroína procedente de Afganistán, se ha incrementado, especialmente en Albania, Bielorrusia, Croacia, Rusia y Moldavia.
En total, en Europa existen entre 2 y 2,5 millones de consumidores de opiáceos, siendo el país más afectado Rusia, con 1,68 millones de usuarios de ese tipo de droga.
Las mayores incautaciones de heroína correspondieron, por orden decreciente, al Reino Unido, Italia y Alemania, mientras que los principales países de origen son los Países Bajos, Turquía, Bélgica y Pakist