Schemel afirmó que “las elecciones regionales son más racionales que las presidenciales (…) la gente vota más por su conveniencia, por aquel candidato que garantice mayor bienestar, que le ofrezca mayores certezas de que sus problemas locales van a ser resueltos”.
Destacó la gran oportunidad de triunfo que tendría el oficialismo en Carabobo, Miranda, Táchira y Zulia, estados en los que, pese a los reveses electorales recientes, es notorio el desgaste de los gobiernos regionales opositores.
“En Zulia hay un desgaste”, expresó el presidente de Hinterlaces, debido a que en la entidad ha gobernado el mismo grupo político en las últimas décadas; mientras que en Carabobo también sucede lo mismo por el cansancio de la gente ante los Salas, en referencia a Henrique Salas Römer y a su hijo, quienes han gobernado la entidad casi ininterrumpidamente desde 1989.
En el caso de Monagas, el presidente de Hinterlaces considera que como la oposición va dividida, se abren excelentes oportunidades para el chavismo.
Capriles no la tiene fácil
Schemel considera que Henrique Capriles no la tiene fácil para alzarse como gobernador del estado Miranda, en tanto su gestión se concentró en algunas zonas de la entidad para “construir vitrinas” y generar una matriz de opinión positiva. Mientras que Guarenas, Guatire, Caracas y Los Teques, fueron regiones desatendidas por su gestión.
Acudió a cifras preliminares en Miranda, las cuales indican que las elecciones estarán “reñidas” y recordó que “a pesar de que (en la entidad) hay una fuerte y numerosa clase media”, resultó electo el presidente Chávez.
Esto resultaría beneficioso para el candidato Elías Jaua, quien se ha comprometido a resolver los problemas de los mirandinos sin exclusión de ningún sector, además de ser conocido por desempeñar una gestión pública eficiente.
Destacó que si bien la oposición creció electoralmente, no lo logró ni social, ni culturalmente. En parte por “las limitaciones discursivas y de formación política” que aquejan a Capriles.
Rectificar las propuestas de Chávez
También insistió en que la clave del triunfo de los candidatos bolivarianos a las regionales será cumplir la propuesta de rectificación que hiciera el primer mandatario durante su campaña. Ofrecimiento que fue cumplido en parte mediante la renovación de liderazgos en los estados donde la calificación de gestión fue baja, y así lo valora el universo de votantes.
“Si esto se articula con la promesa de que los gobernadores chavistas son la garantía se seguimiento, de realización de los proyectos, articulación con el Gobierno Central y garantía de transferencia de recursos”, los nuevos liderazgos revolucionarios resultarán victoriosos, señala el analista.
Clase media y chavismo
El titular de Hinterenlaces dijo que se debería “diseñar un discurso que incorpore a la clase media” que, según expresa “no está en contra del modelo de inclusión, pero siente que no la toman en cuenta”, sumado a que este sector tiene algunas críticas a la gestión.
Esto será posible si se logra compartir una visión y resolver las diferencias en torno a las “supuestas amenazas contra la propiedad privada”, aspecto que ha sido utilizado en el discurso opositor para ganar adeptos.