Según confirmó el director de gestión de productos de la compañía, Scott Dougall, al diario Wall Street Journal, la apertura de la librería digital del gigante de Internet, entorpecida por problemas técnicos y legales durante meses, tendrá lugar por fin en las próximas semanas.
«Dada la complejidad de este proyecto, no queríamos sacar al mercado algo que no estuviera completo», dijo Dougall.
El retraso en el lanzamiento de Google Editions, previsto inicialmente para el primer trimestre de 2010 y más tarde para el pasado verano, ha permitido a la compañía adelantar contratos en varios frentes, como el de las librerías independientes.
Se espera que las pequeñas editoriales aporten gran parte de la oferta de la librería digital, con la que muchas ya están intercambiando archivos, según el diario.
La compañía ha querido diferenciar su biblioteca de otras, como la de Amazon, al diseñar un modelo abierto, en el que los libros puedan comprarse directamente en la propia red o en las librerías asociadas a ella, a través de la cuenta del usuario en Google.
La biblioteca personal que cree el usuario será accesible tanto desde el ordenador como desde otro aparato conectado a Internet, como los teléfonos inteligentes o las «tabletas» como el iPad.El gran ignorado será Kindle, el lector electrónico de Amazon, empresa que ha logrado controlar alrededor el 65 por ciento del mercado de los libros electrónicos gracias, en gran parte, a su exitoso aparato.
Esa apuesta abierta de Google, que no fuerza al usuario a poseer ningún aparato vinculado a su oferta, se amplía con la opción de que el usuario compre los libros a través de la plataforma sin tener siquiera que acceder a la página web de la compañía, con un sistema de venta directa desde las librerías.
La llegada de Google al mundo editorial a tiempo para las Navidades podría triplicar la cifra de ventas de libros digitales este año en Estados Unidos, desde 301 millones de dólares en 2009 hasta 966 millones en 2010, según la consultora Forrester Research.