«Para nosotros es preocupante y es angustiante la situación (…) pero esta es una democracia y los estudiantes pueden expresarse y manifestar inquietudes, demandas y exigencias con los mecanismos que consideren», dijo a periodistas la ministra de Educación Universitaria, Yadira Córdova.
Hace 19 días, tres estudiantes opositores iniciaron una huelga de hambre frente a la sede del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) para exigir, aseguran, un mejor presupuesto para las universidades, grupo al que se han ido sumando otros jóvenes y un par de docentes, y hoy ya se cuentan 21 huelguistas.
«El mecanismo que siempre me ha preocupado es el de la huelga de hambre porque esa es una acción de carácter extremo, que no solo afecta al Gobierno, afecta a las instituciones, a las personas que están en huelga, a su familia», señaló Córdova.
La ministra dijo, además, que esperaba que a través del «llamado al diálogo» que han hecho a los huelguistas logren «muy pronto» encontrar los caminos para que la huelga sea levantada.
Estudiantes y docentes universitarios opositores convocaron a una marcha mañana, martes, desde la UCV hasta la Asamblea Nacional (AN) para insistir en la petición del «presupuesto justo para las universidades» y brindar apoyo a quienes hacen huelga de hambre.
«Garantizamos que la movilización se va a hacer en sana paz y pura tranquilidad» y «esperamos que el Gobierno también cumpla», dijo al respecto Diego Scharifker, el máximo dirigente estudiantil de la UCV a su salida del Ministerio del Interior, donde anunció que 1.100 policías y diez ambulancias protejan la marcha.
Córdova reiteró que no visitará a los estudiantes que hacen huelga en el PNUD, pues ya el Gobierno había hecho el llamado al diálogo, llamado que los huelguistas, asegura, «se han negado a atender».
«Todos los mecanismos que las personas deciden tomar para protestar en una democracia son legítimos, pero se tiene que definir cuál es el alcance de cada una de esas acciones», apuntó la ministra.
Mientras tanto, estudiantes afectos al Gobierno de Chávez iniciaron hoy una «huelga activa» y se encadenaron frente al rectorado de la Universidad Central de Venezuela (UCV) para exigir que autoridades de las casas de estudio rindan cuentas acerca del uso que dan al presupuesto.
«Iniciamos esta huelga activa para que se sepa quiénes son los ladrones y quiénes son los que persiguen a los estudiantes críticos», dijo a periodistas Vicente Moronta, estudiante de la UCV que se encadenó frente al rectorado de la institución.