«Mandar unas pruebas de supervivencia no es un acto humanitario, están otra vez tratando de convertir a los secuestrados en instrumentos políticos de las aspiraciones que tienen las FARC de someter al país a una negociación que no es conveniente, buscando superar el debilitamiento y el deterioro que han vivido», dijo.
Silva hizo sus declaraciones desde la base aérea militar de Rionegro (noroeste), donde encabezó un consejo de seguridad en el que se trató el asunto de la minería ilegal como actividad que financia a los grupos armados ilegales.
La guerrilla colombiana de las FARC entregó pruebas de vida de cuatro policías y un militar que permanecen secuestrados desde hace varios años, entre ellos las de Libio José Martínez, el secuestrado con más tiempo en cautiverio tras cumplir más de 12 años y medio como rehén.
Las pruebas fueron enviadas a la senadora Piedad Córdoba, mediadora ante los rebeldes para la liberación de secuestrados, y divulgadas ayer por el informativo de televisión Noticias Uno.
Los rebeldes enviaron en un vídeo los testimonios de los policías Álvaro José Moreno, Édgar Yesid Duarte, Elkin Hernández Rivas y Luis Alberto Erazo, y del militar Libio José Martínez.
El defensor del Pueblo, Volmar Pérez, invitó hoy a todos los sectores involucrados en el conflicto colombiano a seguir trabajando y explorando vías que permitan llegar a un acuerdo para la liberación de los secuestrados.
«En Colombia es necesario explorar las alternativas (…) que resulten indispensables para realizar un acuerdo humanitario que se inspire en las normas protectoras del derecho internacional humanitario, que le ponga fin de manera definitiva a la horrible práctica del secuestro como instrumento de lucha política», indicó.
Asimismo, indicó que por esa vía se debe garantizar el regreso a la libertad de la totalidad de los secuestrados que permanecen en cautiverio en poder de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y de otras organizaciones armadas al margen de la ley.
El vídeo conocido ayer, de 26 minutos, tiene evidentes cortes de edición de los testimonios de los cinco secuestrados y mal sonido.
Los guerrilleros aún tienen en su poder a 22 policías y militares que esa guerrilla, declarada terrorista en Estados Unidos y la Unión Europea, pretende canjear por guerrilleros presos.
Libio José Martínez, cabo segundo del Ejército, fue secuestrado el 21 de diciembre de 1997), mientras Álvaro José Moreno, subintendente de la Policía, fue tomado como rehén el 9 de diciembre de 1999).
Elkin Hernández Rivas, subintendente de la Policía, fue secuestrado el 14 de octubre de 1998; Édgar Yezid Duarte, capitán de la Policía, el 14 de octubre de 1998, y Luis Alberto Erazo, sargento de la Policía, el 9 de diciembre de 1999.
mp / Reporte360