«Ya no existe más Fibertel. La empresa incumplió la ley nacional y usurpó la licencia que estaba siendo utilizada en forma ilegal», dijo este jueves en rueda de prensa el ministro argentino de Planificación Federal, Julio De Vido.
El ministro cuestionó que la fusión que realizó con la compañía Cablevisión, de televisión por cable, también controlada por el Grupo Clarín, no fue autorizada por el Estado federal.
«Fibertel y Cablevisión decidieron realizar una fusión sin autorización», sostuvo De Vido.
Ello implica que Cablevisión, la mayor empresa de televisión paga de Argentina, tiene prohibido ofrecer el servicio de acceso a Internet utilizando las licencias de Fibertel.
«Para resguardar los derechos de los usuarios, habrá un plazo de 90 días para la migración de los servicios brindados por Fibertel», dijo De Vido.
El gobierno de Cristina Kirchner está duramente enfrentado con la empresa de multimedios más poderosa de Argentina.