De acuerdo a la información dada a conocer, existen lugares de nuestro satélite que deberán ser preservadas ante la visita de futuras misiones o de turistas espaciales. Por ejemplo, la Nasa recomienda que los próximos que “toquen” la Luna se mantengan a unos 75 metros de la zona donde aterrizó el Apolo 11.
Esta decisión surgió en vista del creciente desarrollo de misiones y empresas que ofrecen la posibilidad de visitar la superficie lunar a aquellas personas que quieran realizar un viaje diferente.
Para la Agencia Espacial, estas recomendaciones se hacen con el fin de preservar objetos de misiones anteriores que en el futuro puedan servir como material histórico o para estudios de carácter científico.