La funcionaria insistió en que una nueva Constitución generaría incertidumbre y desconfianza en lugar de coayudar a la «reconciliación nacional»
La fiscal general de la República, Luisa Ortega Díaz, rechazó la convocatoria una Asamblea Nacional Constituyente planteado por el presidente de la República, Nicolás Maduro.
Ortega Díaz fijó oficialmente su posición tras dirigir una carta a Elías Jaua, ministro de Educación y encargado de presidir la comisión presidencial de la Constituyente: “Para resolver la crisis indudable y sin precedentes que atraviesa el país, no es necesario, pertinente ni conveniente llevar a cabo una transformación del Estado en los términos que podría suponer una nueva Constitución”, señaló en su texto.
Rechazó que los constituyentes no sean elegidos de manera directa, universal y secreta, como estipula la carta magna vigente, sino de manera “sectorial o cooperativa”.
“Lejos de coayudar a la ansiada reconciliación nacional, generaría un alto grado de incertidumbre habida cuenta del riesgo y desconfianza que se produciría”, insistió.
La misiva, enviada el 17 de mayo, fue filtrada y difundida en redes sociales. Fuentes judiciales consultadas por El Nacional no desmintieron la información.
El pronunciamiento llegó poco después de que la opositora Mesa de la Unidad Democrática (MUD) dijera públicamente que tampoco participará en la Constituyente, llamando incluso a desconocer la convocatoria.
En una tónica similar se manifestó la Conferencia Episcopal Venezolana (CEV), que tras reunirse con representantes del gobierno, les aclaró que no es necesario reformar al Estado para solucionar los problemas del país.
Tanto la MUD como la CEV coincidieron en que es necesaria la publicación de un cronograma electoral, liberación de presos políticos, reconocimiento a la Asamblea Nacional y apertura de un canal humanitario para combatir la escasez de alimentos y medicinas.