Los episodios más violentos se produjeron en la conflictiva isla de Mindanao, en el sur del país, donde dos personas murieron en un tiroteo entre partidarios de dos candidatos rivales en un colegio electoral de la provincia de Maguindanao.
Otros tres aliados de un candidato a alcalde perdieron la vida y diez fueron heridos en un tiroteo en la provincia de Zamboanga Sibugay, también en Mindanao.
Las otras víctimas mortales sucedieron la sureña provincia de Cotabato del Norte (un muerto y un herido), en la provincia de Lanao del Sur (un muerto) y en la occidental isla de Palawan (un muerto y varios heridos).
Explosiones de granadas y bombas artesanales y otros altercados completan la lista de incidentes violentos durante esta jornada.
Las medidas especiales tomadas por la Comisión Electoral (Comelec), que colocó siete zonas conflictivas bajo su control directo, se han revelado insuficientes para controlar la violencia, endémica en muchas partes del archipiélago, donde se mezcla la presencia de guerrillas islamistas y comunistas con la de los ejércitos privados de los caciques locales.
A la habitual violencia se unieron los problemas técnicos derivados del nuevo sistema electrónico y que obligaron a la Comelec a ampliar el horario de votación una hora.
Los fallos técnicos y la escasez de máquinas obligó a algunos electores a esperar más de seis horas a la puerta del colegio electoral, mientras que otros se quejaron de que sus nombres no se hallaban inscritos en el censo o aparecían en listas equivocadas.
El propio senador Benigno «Noynoy» Aquino, el candidato favorito en los sondeos, tuvo que aguardar más de cuatro horas para votar en su distrito en la ciudad de la provincia de Tarlac, al norte de Manila.
Muchos votantes optaron por rellenar sus papeletas y dárselas a empleados de la Comelec para que éste introdujese los datos en la máquina.
Los mayores contratiempos se han dado en once localidades del sur del país, donde la Comelec estudia suspender las elecciones y volver a celebrarlas en otra fecha.
La Comelec insistió en que se trata de hechos aislados y aseguró que el sistema funciona correctamente en casi todo el archipiélago, mientras que Smartmatic, la empresa fabricante de las máquinas de voto, indicó que «sólo» 328 de los más de 76.000 aparatos son defectuosos y la mayoría ya han sido reemplazados.
Pese a los obstáculos, la Comelec mantiene que hoy colgará un resultado provisional en su página web con el 70 por ciento de los votos escrutados y espera dar datos casi definitivos en un plazo de 48 horas.
Todos los sondeos de opinión conceden la victoria a Aquino, que saca 22 puntos a su inmediato rival, el ex presidente Joseph Estrada, depuesto por corrupto en una revuelta popular pacífica en 2001.
En tercer lugar aparece el senador Manny Villar, un magnate inmobiliario que empezó la campaña igualado con Aquino gracias a una colosal campaña publicitaria y a su discurso populista pero a quien los escándalos de corrupción le han hundido en las últimas semanas.
Pocos analistas creen que Estrada y Villar puedan inquietar al hijo de Ninoy Aquino, el mártir de la democracia asesinado en 1983 y de la fallecida Corazón Cojuangco, la primera presidenta tras la dictadura de Ferdinand Marcos, que ha despertado una inesperada pasión entre millones de electores con el recurrente lema «sin corrupción no hay pobreza».
Todos los candidatos han hecho hincapié durante la campaña en solucionar estas dos lacras, en un país donde el 44 por ciento de la población vive con menos de dos dólares al día.