En una carta enviada a Ford, que había interpuesto una demanda en los tribunales estadounidenses por coincidir el nombre con el de una camioneta de la casa de Detroit, Ferrari señala que «no ha utilizado, ni utilizará un nombre comercial de un producto disponible» y añade que «de hecho no habrá definitivamente una producción de monoplazas»
En el comunicado emitido por Ferrari, explica que «los nombres de los coches de la escudería, representan la nomenclatura de un proyecto de coche de carreras y están vinculados a un orden cronológico con una base técnica, o en casos excepcionales, como este año, se tomó la decisión de dedicarlo a un acontecimiento especialmente significativo, el 150 aniversario de la unificación de Italia, un evento de tanta importancia que el gobierno italiano ha declarado, para este año solamente, una fiesta nacional».
Por estas razones, Ferrari cree que el coche para el próximo campeonato del mundo de Fórmula Uno no puede ser confundido con otros tipos de vehículos disponibles en el mercado, de cualquier tipo que sea, ni puede dar la impresión de que hay una conexión con otra marca de coches de calle, por lo que es muy difícil de entender el punto de vista de Ford en este asunto.
A pesar de ello y para demostrar aún más que está actuando de buena fe y que actúa de forma totalmente correcta, Ferrari ha decidido a garantizar que en todas las áreas de relacionados con el coche, la versión abreviada será sustituido en todo momento con la versión completa, Ferrari F150º Italia.