«Les costó mucho aceptarlo», relató el piloto. «Antes, para tratar de convencerme, me enseñaron muchos tonos de rojo y amarillo, pero no lo consiguieron», aseveró.
El piloto español, cuyo vehículo de competición es rojo, confesó también tener «bastantes» coches en su garaje personal, entre ellos «tres Ferrari: un Enzo, un 458 Italia y un California».
Una vez fuera de los circuitos, Alonso, de 29 años, asegura que prefiere pasar «inadvertido», aunque le «enorgullece» vestir el color rojo de Ferrari en todo evento oficial de su escudería.