El as de los Marineros de Seattle tuvo un control total sobre sus envíos a tal punto que logró abanicar a 13 bateadores de los Padres en ocho entradas de labor, para así igualar su tope personal de abanicados en un encuentro.
«Mi cambio estuvo bien», soltó a los medios norteamericanos Hernández, quien se convirtió en el cuarto lanzador de los Marineros en guillotinar a 13 rivales sin dar boletos. El último en hacerlo fue nada menos que el zurdo Randy Johnson en la temporada de 1997.
«Estaba lanzando muchos strike. Utilicé todo mi repertorio sin problemas», confesó el vigente Cy Young de la Liga Americana, que realizó 114 envíos, de los cuales 75 cayeron en la zona de strike. El criollo solo toleró una rayita y ahora refleja efectividad de 3.01.
De igual manera, la actuación de Hernández alargó el buen momento que atraviesa la rotación de abridores de los Marineros, que solo permitió una rayita limpia a la ofensiva de los religiosos en la serie de tres partidos.
Seattle a ha ganado cinco juegos en fila y 14 de los últimos 23 partidos. Esta racha le ha permitido a la tropa de Eric Wedge salir del sótano de la División Oeste de la Liga Americana y colocarse a juego y medio de los líderes