«Además de los tres reactores que estaban operando al momento del incidente, ahora mismo también hay un cuarto reactor que genera preocupación. Este reactor estaba cerrado al momento del terremoto», dijo el jefe de la NRC, Gregory Jaczko, informó AFP.
«Lo que creemos actualmente es que hubo una explosión de hidrógeno en esta unidad debido a que quedó descubierto el combustible de la piscina de combustible usado», agregó, subrayando que la explosión ocurrió hace varios días.
«Creemos que la contención secundaria quedó destruida y que no hay agua en la piscina de combustible usado, y creemos que los niveles de radiación son extremadamente altos, lo que podría afectar la capacidad de tomar medidas correctivas», explicó.
Por su parte, el director general del Agencia Internacional de Energía Atómica (AIEA), Yukiya Amano, afirmó que la situación «es muy grave pero no está fuera de control».
Sobre el estado en la central de Fukushima, Amano explicó que pese a que se desconoce cuál es la situación exacta en el interior de los reactores, sí que se sabe que los núcleos sobresalen entre uno y dos metros del agua que los cubre.
Mientras, el director de Seguridad Nuclear de la AIEA, Denis Flory, se refirió a que los esfuerzos para inyectar agua en el núcleo: «es lo mejor que se puede hacer y lo que recomiendan los expertos». En ese sentido, indicó que la evolución de la crisis dependerá «de la capacidad de enfriar el núcleo y de reducir la presión».
El experto destacó que se han registrado emisiones de gases y vapores a la atmósfera pero no de partículas sólidas, algo especialmente peligroso en el caso del reactor número 3, que emplea plutonio como combustible nuclear. «El plutonio no es una preocupación en este momento», dijo Flory.
Respecto a la radiación, Amano admitió que los niveles «han aumentado en Tokio y otras ciudades» pero descartó que supongan un peligro para la salud humana.
Los operadores de la planta dijeron que hoy volverán a usar helicópteros militares para lanzar agua en los reactores más afectados, luego de abandonar el primer intento ante el aumento de los niveles de radiación desde el viernes.
Asimismo, un avión no tripulado de las Fuerzas Armadas estadounidenses tratarán de aclarar la situación actual de los reactores dañados en el interior de la central nuclear de Fukushima, informó la agencia de noticias japonesa.
El gobierno estadounidense le recomendaron a sus ciudadanos alejarse a 80 kilómetros de la planta nuclear afectada por el terremoto de magnitud 9,0 y el posterior tsunami.