Aunque para gran parte de la población zuliana, sobre todo para la que vive en la metrópolis de Maracaibo, los delfines son un animal que pertenece a otras latitudes; la verdad es que por miles de años la Sotalia Guianensis o delfín estuarino, mejor conocido en la zona como “Tonina del Lago”, ha hecho del Lago de Maracaibo y del golfo de Venezuela su hogar.
Pero no es casualidad que las personas no sepan sobre la presencia de la tonina en el Zulia, pues la misma IUCN por sus siglas en ingles (International Union for Conservation of Nature o Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza publicó un informe en 2008 en el que asegura que este delfín “no ha sido suficientemente estudiado”.
El profesor de ecología de la Universidad del Zulia, Héctor Barrios, quien coordina varios proyectos de investigación de la Facultad de Biología en torno al cetáceo regional; manifestó que no había sido hasta en los últimos años en los que se han realizado estudios más extensos sobre el comportamiento, los hábitos alimenticios y la densidad poblacional del mamífero acuático.
“El delfín estuarino o tonina del Lago como se le conoce, no es igual al delfín rosado o tonina del Orinoco, que es el que aparece en el billete de 2 bolívares; se trata de una especie totalmente distinta (…) estamos adelantando varios estudios con las poblaciones de delfines del norte en el golfo de Venezuela, al norte de San Carlos y Zapara y esperamos poder avanzar luego con los estudios de las poblaciones del Sur del Lago”, aseguró el catedrático.
La tonina de lago es un cetáceo pequeño de entre 1,4 y 1,7 metros de longitud desde la punta del hocico hasta el final de su cola y su aleta dorsal aleta dorsal es triangular y ligeramente falcada. Como todos los delfines es piscívoro; es decir, se alimenta exclusivamente de peces, en especial de lisas y curvinas. Su coloración es gris su parte superior y su vientre es color rosa; sin embargo no debe confundirse con el delfín rosado del Amazonas.
Al delfín estuarino se le puede ver en el Lago de Maracaibo usualmente en manadas de 3 a 4 miembros, regularmente conformada por la madre y dos crías, explicó Héctor Barrios. No obstante, se sabe que pueden agruparse en manadas de hasta 60 ejemplares para cruzar el estrecho o realizar viajes largos.
Kareen de Turris, estudiante de Biología de la Universidad del Zulia, quien desarrolla un ambicioso proyecto de investigación sobre la tonina, manifestó que la coordinación necesaria para una agrupación tan numerosa es posible gracias al avanzado sistema de comunicación de estos delfines que utilizan básicamente dos sonidos: “Clicks” que son sonidos imperceptibles al oído humano por encima de los 20 Khz. y “Silbidos” que sí se encuentran en el rango de escucha del hombre.
La observación de delfines como actividad eco turística ha sido subexplotada; pues solamente es ofrecida por pocos paquetes turísticos del estado Mérida, que incluyen en el recorrido por los páramos, y la visita de varias atracciones en la entidad andina. El costo del viaje en lancha para ver a los delfines del lago con estos paquetes va de 300 a 500 Bolívares por persona con una probabilidad de avistamiento del 70%. Hasta la fecha, quienes realizan estos recorridos son en su gran mayoría turistas europeos y no existe ningún tipo de normativa que regule que esa actividad.
“La distribución del delfín estuarino va desde el Sur de Brasil hasta Honduras, así que no se puede hablar de una extinción total de la especie, sin embargo, existen probabilidades muy reales de que el delfín desaparezca de aguas zulianas. Actualmente es considerado una especie vulnerable, pero estamos proponiendo que se cambie la calificación a en peligro de extinción; sin llegar a peligro crítico” manifestó Héctor Barrios.
Actualmente no existe ningún estudio científico preciso sobre la densidad poblacional del cetáceo en el Lago de Maracaibo, no obstante resultados preliminares arrojan estimaciones de que la población se habría reducido en más del 50% tan sólo en los últimos 10 años o 3 generaciones.
Ocasionalmente pescadores atrapan toninas, a veces de forma incidental y otras de manera intencional; sin embargo esto no es muy común, pues la carne de delfín se puede vender de forma ilegal solo a 15 Bolívares el kilo, ya que no es muy agradable al gusto. Los pescadores utilizan su carne como carnada para tiburones.
El gerente de operaciones del Parque Zoológico Metropolitano del Zulia, Luis Añez aseguró que aunque sería irresponsable dar un lapso para la extinción de la tonina del lago, definitivamente no es algo que se puede tomar a la ligera, pues existen demasiados factores de riesgo en el Lago de Maracaibo, que de un segundo a otro podrían empujar a nuestro cetáceo directo a la extinción. “Un derrame petrolero significativo podría significar el fin de la especie, al menos en las nuestras aguas territoriales” destacó.
Héctor Barrios explicó que la empresa petrolera constituye una de las más grandes amenazas para el delfín “Hasta ahora no se han registrado grandes muertes por derrames petroleros, pero si aquí llegara a pasar que fuera el 25% de lo que pasó en el Golfo de México, el delfín estuarino no tendría posibilidades de supervivencia, al igual que otras especies que están aun más amenazadas como el manatí”.