Elluz Peraza: Sin humildad no hay éxito

   La serenidad y dulzura de Elluz Peraza hace cortocircuito con la personalidad fría y calculadora de “La Toña”, rol que encarna en la telenovela El fantasma de Elena, que transmite Televen a la 1:00 de la tarde.

Desde Miami, la artista responde la llamada de Panorama para conversar sobre este reto que la devuelve a la pantalla criolla, luego de participar en “El rostro de Analía”.

— “La Toña” parece ser todo lo opuesto a Elluz, ¿cierto?

—Completamente cierto. Yo soy todo lo contrario a ella. Es un personaje bastante interesante por todos los matices que presenta, pero de Elluz no tiene nada. Creo que estoy bastante lejos de llegar a ser como ella.

—¿Justifica su actitud?

—Nunca podré justificar las malas acciones, la mala intención, por ningún motivo. Así que estoy completamente en contra de lo que hace.

—La hemos visto en telenovelas alejadas del tinte rosa, ¿cómo ve esta tendencia de innovar con historias fuera de lo común?

—Me parece fantástico que a los actores nos permitan trabajar en telenovelas en las que se mezclan varios géneros. Nos dejan jugar con personajes distintos y eso es beneficioso porque aporta algo nuevo a nuestras carreras. Lo que más importante en estas historias es que siempre exista una trama romántica.

—¿Cómo es el ritmo de trabajo de Telemundo, comparado con el de los canales venezolanos?

—En Venezuela se trabaja con más calma. El ritmo de Telemundo es bastante acelerado porque se hacen muchas novelas. Son muchas escenas en el día y hay dramáticos que se graban en sólo cinco meses, cuando el tiempo normal es de siete u ocho meses.

—Desde “Lejana como el viento” no trabaja en Venezuela, ¿Por qué se fue a Miami?

—Me fui simplemente porque no me siguieron llamando. Aquí me contrataron y ya son varias las producciones en las que he participado.

—¿En qué etapa de su carrera se encuentra?

—En una etapa de crecimiento. Una etapa en la que siento respeto como actriz. Realmente no me falta nada.

—¿Para usted cuál es la clave del éxito en la TV?

—La sencillez, la humildad. Sin eso no hay éxito. Hay a quienes se les suben muchos los humos por trabajar en TV y terminan ignorados y olvidados en el tiempo.

—¿Cómo es su vida en EE UU?

—Muy tranquila. Desde que murió mi padre me mudé con mi mamá. Ya pronto mi hija se vendrá a vivir con nosotras. Aquí siento que estoy en Venezuela porque han hecho una pequeña colonia de venezolanos en la ciudad donde conseguimos de todo, desde arepas hasta música y tradiciones nuestras.