Ellos son los miserables que cayeron abatidos tras asesinar a un anciano para atracarlo cerca de la C-1

     En menos de dos horas, dosatracadores quienes asesinaron sin piedad a un anciano por resistirse al robo, cayeron abatidos por funcionarios del Cuerpo de Policía Bolivariana del Estado Zulia (Cpbez) en un enfrentamiento a tiros.

A las 11.30 de esta mañana, los dos maleantes, uno de ellos identificado como Josué David González Marquinez (20), y otro aun sin ser reconocido, ingresaron, como si fuesen clientes, al local “Cyber De Ñoño”, ubicado en la calle 110 del barrio Altamira Sur, parroquia Cristo de Aranza, cerca de la Circunvalación 1 (C-1) de Maracaibo.

Ambos solicitaron dos computadoras y abrieron sus cuentas en Facebook, indicó un testigo del suceso.

Cuando Rodolfo Torrecilla Pedroza, de 74 años, propietario del establecimiento, salió del lugar a tomar un receso, cerca del mediodía, los hampones atracaron a los presentes, pero solo lograron robar un celular, mencionó el declarante.

Al salir, los delincuentes agarraron a Rodolfo y le exigieron sus pertenencias, pero el septuagenario se resistió, por lo que uno de ellos le efectuó un disparo en la cabeza que le quitó la vida al instante.

Los homicidas escaparon a pie, y  en la huida unos patrulleros del Cpbez que pasaban por el sitio observaron la escena y los persiguieron.

En minutos, más de una veintena de policías, quienes ya habían solicitado el refuerzo de una comisión de la Policía Científica, inició una persecución que terminó en la calle 33C del barrio Los Pinos, parroquia Manuel Dagnino, a la 1.10 de la tarde, aseguró una fuente detectivesca.

En esta última dirección, los atracadores habían intentado irrumpir en una vivienda para “enconcharse”, pero el propietario, con un cuchillo en mano, logró impedirles el acceso, relató un vecino de la zona.

Atrás les pisaban los talones los efectivos, y al interceptarlos, los asesinos sacaron sus armas y abrieron fuego.

En la balacera resultaron heridos los dos delincuentes, cuyos cuerpos cayeron en plena carretera a unos metros de distancia.

Los policías los levantaron y llevaron al Hospital General del Sur (HGS), pero ambos, quienes al parecer residían y eran azotes en el barrio Villa Esperanza, ingresaron sin signos vitales.

Allegados de la víctima, consternados por el crimen, no quisieron emitir mayores detalles de Rodolfo antela prensa.

Pasadas las 3.00 de esta tarde comisiones de ambos organismos de seguridad seguían en el área delenfrentamiento ejecutando las actividades de experticia.

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