“Cumplí un sueño”, dijo González a ESPNdeportes.com.
González, quien es nativo de Guacara estuvo feliz durante todo el día. Desde la madrugada del lunes contó con la compañía de su esposa Lenna, su padre Manuel y un cuñado, que viajaron desde Suramérica para asistir a la ocasión. No tenía una idea clara del impacto de su gesta, hasta que sus parientes le entregaron los periódicos venezolanos que han cubierto la noticia a la distancia, incluyendo varias primeras planas.
“No estaba al tanto de eso”, confesó el umpire. “No he podido vivirlo acá, salvo lo poquito que he visto por internet”.
Ha habido tiempo para recordar a Leonel Carrión, quien se convirtió en el primer coach venezolano en las mayores, el 6 de abril de 1987, con los Expos de Montreal. Y por supuesto, a Oswaldo Guillén, el primer manager de esta nación, quien debutó al frente de los Medias Blancas el 5 de abril de 2004.
“No sé si deben hacer esas comparaciones, porque ellos tuvieron toda una trayectoria”, indicó González. “Para mí es un honor oír eso”.
Esta edad de oro, paradójicamente, ocurre cuando la Venezuelan Summer League vive su momento más discreto: apenas siete organizaciones inauguraron esta semana la edición 2010 del circuito, debido a la situación socioeconómica que vive el país suramericano.
Luego de su segunda experiencia, el martes, también en Miami, el primer umpire venezolano en las grandes ligas regresa a Triple A. Espera volver a subir pronto y deja un camino trazado, del mismo modo que, en cierta forma, el “Patón” lo dejó para él.
Tomado de Espn (Ignacio Serrano)