El Rey de Seattle mantuvo su opción al Cy Young tras maniatar a los Indios

   A pesar de su récord, el Rey sigue empeñado en ser el Cy Young de la Liga Americana. Y, a medida que siga lanzando como lo hizo ayer, seguirá ganando más adeptos y su campaña cobrará más fuerza.

Félix Hernández le explicó a los Indios de Cleveland por qué es considerado por muchos, el pitcher más completo de la Liga Americana, al recitarles 8 ceros, en donde ponchó a 9, solo otorgó un boleto y hasta se adjudicó la victoria de su equipo, por 3-0, para poner su récord en 11 y 10. «Todo me estaba funcionando», confesó al término del choque.

Como ya se sabe, su registro de ganados y perdidos engaña tanto como su profundo repertorio, el cual se ve reflejado en las estadísticas que dependen de él mismo.

Por ejemplo en los ponches. Ya tiene 209 en la campaña y volvió a desbancar a Jered Weaver en el primer lugar de la Liga Americana. En su efectividad, la cual mejoró hasta 2.30, muy cerca del líder Clay Buchholtz, que tiene una de 2.25.

Es que el mensaje ya ha sido mandado: el Rey está en un momento cumbre de su carrera, liquidando todo lo que se encuentre a su camino.

En sus últimas 45 entradas de actuación ha permitido apenas una carrera limpia, para una milimétrica efectividad de 0.20 en dicho lapso. En una sola palabra: dominio.

También puede resumirse en constancia. El Rey alcanzó las 219.1 entradas en el año, primero en su liga.

Esto se debe a que cada una de sus presentaciones es un cheque al portador, pues llegó a 23 salidas de manera consecutiva, en las que totaliza al menos 6 innings completos.

Todo lo que está a su alcance parece lograrlo… Y de la forma más solitaria posible, en un equipo ubicado en el sótano de la división oeste de la Americana, que cuenta con la peor ofensiva del circuito.

Si todavía alguien duda, Félix amaneció ayer con un apoyo ofensivo de 3.32 carreras por cada una de sus presentaciones. Se trata del peor para un pitcher de la Americana, detrás del 3.26 que posee Kevin Millwood.

Ya habrá tiempo para seguir discutiendo si puede ganar o no el Cy Young con un récord tan humilde. Lo que está claro es que si termina la campaña hoy, sería uno de los firmes candidatos.

En la parte final de su camino, le restan aproximadamente cinco presentaciones, o en su caso cinco razones más, para explicarle al mundo del beisbol por qué debe ser coronado.

Si sigue lanzando como lo hizo ayer, seguirá despejando dudas tratando de convencer a los votantes para el premio.

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