Con una estética y prestaciones realmente impresionantes, el Ford Mustang Boss (302, 429 y 351) logró cautivar a medio mundo, en sus cortos tres años de vida. Hoy, la marca ha resucitado al modelo, con la premisa de hacerlo más deportivo, eficiente y rápido. Se ha realizado un arduo trabajo, que resulta en un grandioso vehículo de competición homologado para carretera, ni más ni menos.
La motorización de este magnífico pony car lleva como corazón un V8 de 302 cc y 440 CV de potencia. Su par máximo es de 515 Nm, y puede alcanzar la velocidad máxima de 250 Km/h. Posee un embrague específico, con una caja de cambios manual de seis marchas.
Existirá una versión aun más radical, llamada Ford Mustang Boss 302 Laguna Seca; una serie limitada que hereda rasgos como la aerodinámica, defensas y buena parte de la carrocería del Mustang Boss 302R, modelo de competición creado por Ford Racing. El Laguna Seca monta buckets de Recaro preparados para instalar arneses de competencia.