En sus respuestas, McKinley, subraya cómo EE. UU. incluyó en su lista a dos funcionarios del gobierno de Chávez y a un ex funcionario por «apoyar materialmente las actividades de narcotráfico de las Farc».
Asimismo, añade, que Washington ha venido «descertificando» a Venezuela desde el 2006 por su falta de cooperación en la lucha contra el terrorismo y tiene vetada la venta de armas a este país, reporta El Tiempo.
En sus declaraciones, el nuevo embajador describe a las Farc como una organización terrorista y narcotraficante que está «diezmada de manera significativa» pero que «perdura y sigue siendo peligrosa».
Algo que viene demostrando con un incremento de ataques con bombas pequeñas y que explica como un «cambio de tácticas».
Las Farc, dice el funcionario, siguen siendo «un factor de desestabilización para la región y un reto para el gobierno colombiano».