Washington, EFE- Acerca de las relaciones con países no afines en la región, como Cuba o Venezuela, el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca, Mike Hammer indicó que «siempre puede haber diferencias ideológicas, eso lo entiende muy bien el presidente Obama, pero quiere ver dónde hay oportunidades de que esas relaciones puedan mejorar».
«Cuando haya desacuerdos vamos a hablar de ellos, insistir en que debe haber cambio. Peroal final, en lo que estamos interesados es en avanzar en las áreas donde tenemos intereses comunes», destacó el portavoz.
El presidente ya visitó México en dos ocasiones y participó en la Cumbre de las Américas celebrada en 2009 en Trinidad y Tobago, recordó el portavoz, quien añadió que «seguro» que Obama retornará en el futuro.
No obstante, Hammer matizó que por el momento no existen anuncios concretos.
El portavoz hablaba así tras una rueda de prensa para analizar los efectos en la política exterior del cambio en la correlación de poderes en el Congreso de EE.UU. tras el triunfo republicano en las elecciones legislativas del martes.
Según afirmó, «no hay ninguna razón para preocuparse sobre la capacidad del presidente para continuar una agenda muy firme de implicación con el resto del mundo».
Obama, sostuvo, «colaborará con el Congreso en materia de política exterior», donde no debería haber cambios sustanciales, por cuanto tradicionalmente ese área cuenta el apoyo de los dos partidos.
En declaraciones a la prensa, Hammer, sostuvo que el Gobierno del presidente Barack Obama concede una gran importancia a la región vecina y subrayó que EE.UU. cuenta con «una política real» hacia la región, «una política que promueve los intereses estadounidenses y de los pueblos de las Américas», dijo.
«El hecho de que no estemos todos los días hablando de América Latina es en sí una buena noticia. Eso quiere decir que no hay preocupación» por la situación del área, que mantiene su crecimiento económico y su estabilidad, indicó el portavoz.
Según Hammer, en América Latina «la situación es bastante buena, en términos de las economías de la región, las democracias se han asentado», destacó.
«Obviamente, el presidente de EE.UU. siempre se va a centrar en lugares donde haya una crisis. En América Latina no hay una crisis, pero sí hay muchos países con los que podemos cooperar» para avanzar en la situación económica, el comercio, la lucha contra el narcotráfico y la seguridad, agregó Hammer.