La nueva miss Internacional venezolana regresó triunfante de Japón. Edymar Martínez compartió con la prensa su experiencia en el concurso internacional
La nueva miss Internacional venezolana regresó triunfante de Japón pero sin la corona sobre su cabeza. Edymar Martínez arribó ayer a Venezuela y se prepara para dos semanas llenas de actividades y compromisos con la organización Miss Venezuela, Venevisión y Cisneros Media.
En un encuentro con los medios de comunicación en Caracas, la oriunda del estado Anzoátegui compartió con la prensa su experiencia en el concurso internacional. Aunque confiesa haberle temido al fracaso, también se manifestó segura, gracias a la preparación obtenida antes de partir. “Las misses venezolanas no tenemos secretos; sino una preparación completa, un gran equipo y nuestras ganas de luchar”.
A pesar de no haber tenido un recibimiento como otras ganadoras, la venezolana dijo sentirse “una celebridad”. Ha conseguido que más de 230 mil personas en Instagram la sigan y sus ansias por visitar a la Virgen del Valle y llevarle una réplica de su corona se mantienen latentes.
Difícil aventura
Sobre los tropiezos que tuvo que sortear en el país oriental destacó lo difícil que le resultó encontrar una comida que disfrutara. “Estoy acostumbrada a comer grandes cantidades y allá no podía hacerlo”. Recordó el dinero que le prestó a la representante de España para arreglar su traje típico, pero admitió que su vida ha sido plena. Lo que más extrañó de su país durante los días en Tokio fue la gastronomía típica y a su madre, quien es su “mejor amiga”.
La beldad tiene presente que le espera un año lleno de actividades, eventos y compromisos con la organización del Miss Internacional, pero llegar a ser una modelo de la marca Victoria’s Secret es su mayor sueño.