Los dirigentes de la Unión Europea (UE) decidieron el jueves imponer sanciones más severas a Irán que las decididas la semana pasada por la ONU, al dirigirse especialmente al sector nacional clave del gas y petróleo, indicaron fuentes diplomáticas.
Reunidos en cumbre en Bruselas, los 27 establecieron una lista de sectores que sancionarán por la falta de cooperación de Teherán sobre su programa nuclear, que las grandes potencias sospechan que esconde fines militares.
La UE quiere prohibir en particular las inversiones extranjeras y la transferencia de tecnología y equipamientos al sector del gas y petróleo, y los detalles de estas medidas serán determinados en julio.
Irán posee las segundas mayores reservas de gas natural en el mundo y es el segundo exportador de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP).
Los europeos también pretenden incrementar la presión sobre la República Islámica aplicando medidas contra los bancos iraníes y el cuerpo de élite de la Guardia Islámica Revolucionaria.
El Consejo de Seguridad de la ONU aprobó la semana pasada el cuarto paquete de sanciones desde 2006 contra Irán, por su negativa a abandonar su polémico programa de enriquecimiento de uranio.