En declaraciones a Efe, el presidente de la asociación «Equality Italia«, Aurelio Mancuso, criticó que, en materia de derechos humanos y libertades, Italia está cada vez más lejos de Europa y Occidente.
«Mientras él (Berlusconi) no da ninguna libertad, se toma la libertad de enviar un mensaje negativo, no sólo a Italia sino también al resto del mundo, que no es otro que para conseguir el éxito basta ser complaciente con los poderes», denunció Mancuso.
Respecto a la supuesta implicación del primer ministro italiano en el caso de la menor Ruby R., Mancuso aseguró que debe ser la magistratura quien decida si es culpable o no, aunque insistió en que Berlusconi debe abandonar el poder.
«La cuestión hoy es que este país se esta convirtiendo en un país pobre, abandonado de sí mismo y también inmoral por culpa de su presidente», afirmó el responsable de «Equality Italia» antes de añadir que la clase política es «vieja» y que no conecta con la sociedad italiana.
«El presidente se debe ir porque este país finalmente debe poderse liberar del Medievo y de la clase política anciana, vieja, que ya no estará más en sintonía con la sociedad italiana«, subrayó Mancuso.
En una octavilla repartida por esta asociación, también se denuncia que «no se puede soportar más que mientras los italianos sufren una de las peores crisis económicas de la historia de Italia, se deba seguir discutiendo sobre las fiestas y el ‘bunga bunga’ del primer ministro«.
La polémica por los festejos de Berlusconi resurgió el pasado viernes, tras conocerse que la Fiscalía de Milán le investiga por un supuesto delito de incitación a la prostitución de menores y concusión por el llamado caso Ruby, la joven marroquí que cuando era menor de edad acudió a las fiestas del político en su residencia milanesa de Arcore.