El cuerpo, con signos de tortura, fue dejado junto al monumento a Colón, acompañado de un mensaje atribuido al crimen organizado que asegura que la víctima es un moderador de la página web ‘Nuevo Laredo en vivo’, dijo un reporte de la policía local.
“Me pasó esto por no entender que no debo reportar en las redes sociales”, señalaba el mensaje colocado junto al cuerpo.
Este sería el cuarto cibernauta asesinado en esta localidad, fronteriza con Laredo (Texas), por denunciar hechos ligados al crimen organizado.
En septiembre fue hallado en el mismo lugar el cadáver de la periodista María Elizabeth Macías, que bajo el seudónimo de “La Nena de Laredo” coordinaba la web ‘Nuevo Laredo en vivo’, que reúne informes suministrados en redes sociales por vecinos sobre balaceras y movimientos sospechosos, publicaba consejos sobre protección e invitaba a denunciar a los criminales.
En Nuevo Laredo tiene una fuerte presencia el cartel de Los Zetas, creado por militares desertores y al que se atribuyen numerosas matanzas especialmente en el noreste y este de México.
Según organizaciones como Reporteros Sin Fronteras, las redes sociales se han convertido en una fuente alterna de información para la población, ante la autocensura que aplican muchos medios locales en las zonas más afectadas por la violencia de los carteles.