Según esa fuente, la medida ya se aplica desde el lunes, pero se hizo pública cuando la Oficina de Activos Extranjeros del Departamento del Tesoro estadounidense emitió una resolución autorizando ese tipo de transacciones, citó DPA.
Empleados de Western Union en Cuba citados por la cadena BBC aseguraron que en cuanto se conoció la noticia se dispararon los envíos de dinero de emigrados a su país.
Hasta el lunes pasado, los cubanos que recibían dinero de sus familiares emigrados a Estados Unidos debían pagar un impuesto de un 10% al cambiar dólares a pesos cubanos convertibles. La reforma elimina esa alta tasa.
También el gobierno cubano se ve favorecido, puesto que recibirá los dólares enviados de inmediato, sin necesidad de tener que esperar a que los beneficiarios los cambien. Estados Unidos, por su parte, podrá controlar mejor el dinero que envían los cubanos en el país.
A pesar de este avance, el gobierno de Raúl Castro optó por «la menos audaz» de las reformas para actualizar el modelo socialista cubano, aunque puede propiciar cambios en la isla comunista, según un análisis económico de la Iglesia publicado este domingo.
«Tras varios meses de tanteos» sobre «los cambios que debían realizarse para actualizar nuestro modelo económico, las autoridades se han decidido» por «la menos audaz de las reformas que poseían en su arsenal: ampliar el trabajo por cuenta propia (privado)», según la revista Palabra Nueva de la Arquidiócesis de La Habana, que encabeza el cardenal Jaime Ortega, destacó AFP.
El artículo, escrito por el economista Orlando Freire, destacó que «el Estado no se ha desprendido de ninguna de sus propiedades» mediante «un proceso de privatización… sino que insta a los trabajadores que sean declarados disponibles (cesantes) en sus entidades a que incursionen en el autoempleo».
Reclaman libertad
Pese a un acuerdo entre la Iglesia y el gobierno cubano, por el cual se liberaron hasta ahora a 41 disidentes, las autoridades dejaron pasar las Navidades sin excarcelar todavía a otros 11 prometidos, lamentaron sus familiares.
«Hasta ahora no tenemos ninguna señal de que haya alguna liberación en camino», dijo a Laura Pollán, esposa del disidente Héctor Maseda. Las autoridades sostuvieron siempre que no se trataba de presos políticos, sino de «mercenarios» que cometieron delitos, citó AP.