Existe una temperatura ideal para cada tipo de vino y así puedan conservar sus propiedades. Te invitamos a conocer los grados que aplican para cada uno y no pierdan su sabor, aroma y textura.
Los vinos tienen diversas características, como el
aroma, la textura y el sabor que los hace únicos, las cuales los diferencia uno de los otros; por lo que hay vinos espumosos, también tintos y blancos. Para poder conservar esos detalles, es necesario conocer la temperatura ideal para cada tipo de vino y así conservar sus propiedades por mucho tiempo.
Saber cuál es la temperatura ideal para cada tipo de vino es muy importante, porque de esto dependerá que cada vino pueda mantener intactas sus características particulares, y no perder los rasgos que lo hacen la bebida predilecta de muchas personas.
Aunque para muchos cuidar la temperatura de cada vino parezca un capricho, realmente es un factor importante para poder sacar el mejor provecho de todas sus características, no solamente al momento de conservarlos en una vinoteca encastrable o integrable, sino también al momento de servirlo.
A diferencia de un refresco, que puede llevar hielo o no, incluso las cervezas, los vinos tienen particularidades muy específicas, de hecho, podría decirse que cada vino tiene una personalidad propia que no va con cualquier temperatura.
Algunos estudios confirman que existen varios motivos saludables para tomar vino, por lo que no está de más saber cuál es la temperatura ideal para cada tipo de vino y sacar provecho de sus propiedades.
Vino tinto
Foto, Pixabay
Tal y como su nombre lo indica, el vino tinto es elaborado en base a uvas tintas y su fermentación se lleva a cabo con el hollejo y el mosto de las uvas. Este proceso es el que le da su particular color oscuro, el cual puede variar dependiendo del período de maceración.
Probablemente, este sea el vino más consumido en el mundo; su periodo de envejecimiento durante la crianza es generalmente de 24 meses, con un tiempo mínimo en barrica de roble de 6 meses.
Muchos creen que el vino tinto se debe tomar a temperatura ambiente, sin embargo, no es del todo cierto, sobre todo si es verano y hay altas temperaturas. Lo recomendable no es tomarlo ni muy frío ni muy caliente.
Teniendo en cuenta esto, la temperatura ideal para servir un vino tinto es de 10°C a 16°C en los casos de un vino tinto joven; entre 14°C y 18°C si se trata de un vino de crianza. En los casos del vino tinto de reserva y gran reserva, se recomienda que tenga una temperatura entre 16°C y 18°C.
Vino blanco
Al igual que el vino tinto, el vino blanco también se elabora con mosto de tintas y blancas, solo que las tintas, no cuentan con pulpa de color y sus hollejos no se someten a maceración.
El proceso de elaboración del vino blanco, implica prensar las uvas para obtener el mosto sin las pieles y así lograr ese particular tono amarillento y transparente que tiene el vino blanco.
Los vinos blancos generalmente se sirven fríos, porque las bajas temperaturas, hacen que los niveles de acidez sean menos fuertes. Sin embargo, una temperatura baja en extremo, puede que quiebre la relación entre el nivel de acidez y el olor del vino.
Para poder disfrutar de ese equilibrio entre su sabor y aroma, se recomienda degustar el vino blanco a una temperatura de 8°C.
Vino espumoso
Los vinos espumosos, tal y como lo dice su nombre, suelen tener mucha espuma, debido a su contenido de gas carbónico natural. Este resultado se debe a la fermentación en botellas y depósitos cerrados, para que el dióxido de carbono que se genera quede atrapado dentro del recipiente.
Existen muchos métodos tradicionales para prepararlo, sin embargo, la técnica de fermentación siempre está presente y así darle esa textura espumosa que lleva en su nombre.
La temperatura ideal para degustar un vino espumoso o cavas, debe estar aproximadamente entre 6°C y 7°C, puesto que entre mayor temperatura, el vino se haría mucho más pesado y amargo, perdiendo la textura de las burbujas que se consigue durante su preparación.
Con respecto a la temperatura ideal para cada tipo de vino, hay que tomar en cuenta que una cosa es la temperatura al momento de degustarlos y otra para conservarlo. Por esta razón, existen diversos modelos y marcas de vinotecas en el mercado muy útiles, fabricadas para conservar los vinos en el mejor estado.
En caso de que se tengan varios tipos de vinos en casa, lo ideal es adquirir una vinoteca de dos temperaturas, que pueda mantener o refrigerar las botellas en las mejores condiciones dependiendo del vino.