De acuerdo a un reciente análisis dpublicado de la revista especializada en economía y finanzas Forbes, hay una vieja regla básica para cualquier inversión: no compres nada que no conozcas. La expresión financiera también aplica para el Bitcoin, la más famosa de las novedosas criptomonedas.
Este instrumento digital ni siquiera debe ser considerado como una moneda y debe separarse de su envoltura tecnológica, advirtió a este portal Michael Strobaek, director de sistemas de información global de la empresa de servicios financieros suiza Credit Suisse.
“Una moneda es emitida por un banco central, cuenta con una tasa de interés y está regulada. Estas criptomonedas no tienen nada de eso. Es muy desafortunado que alguien haya decidido llamarlas divisas, porque no lo son. Solo son una expresión de valor de transacciones en internet”, comenta el directivo en entrevista con Forbes México.
La declaración se produce en medio de una fiebre por el instrumento monetario virtual, cuyo valor ha rebasado los 10.000 dólares.
“Puede que valga $ 10.000, pero mañana puede caer a 5.000 sin saber por qué. Nadie puede explicarlo. Tal vez fueron hackeados o a alguien no le gustaron. Para nosotros es totalmente especulativo”, responde Strobaek luego de recordarle el valor que ha alcanzado el Bitcoin esta semana.
El directivo también desconfía de la “criptodivisa” porque carece de un valor fundamental añadido y lo compara con un boleto de lotería con quien comparte el mismo grado de especulación. Las monedas de libre fluctuación, como el peso y el dólar, basan su oferta y demanda en su fortaleza económica, es decir, en indicadores como el PIB, la inflación, el desempleo y la tasa de interés de su banco central.
La segunda economía más grande del mundo, China, prohibió en septiembre de 2017 las ofertas iniciales de criptomonedas, pues las considera ilegales. El regulador de mercados estadounidense, (SEC, por su siglas en inglés) ha lanzado alertas sobre las operaciones y ha obligado a registrarlas, pero sin prohibirlas.
“En nuestra terminología no deben ser vistas como una inversión en lo absoluto. No creo que pertenezcan a ningún portafolio de inversión”.