Aunque todas son distintas, bien sea por su manera de hablar, pensar o comportarse, todas las mujeres coinciden en que lucir bien es vital para marcar la diferencia en cada uno de los roles que desempeñan. Es por ello, que la mayoría de las mujeres tienden a consentirse cada vez que pueden, no solo con tratamientos de belleza, sino también en todo aquello que tenga que ver con lo que lleva puesto.
Muchos coinciden en que gastar dinero en ropa es una frivolidad, mientras que otros consideran que lo que nos gusta y nos hace lucir bien no es un gasto, sino una inversión a favor de la imagen que queremos proyectar.
En especial las mujeres tienden a ser muy coquetas, les encanta combinarse bien sea con accesorios, carteras, cinturones, en fin, todo aquello que las haga lucir diferentes a las demás, eso es motivo suficiente para realizar cualquier inversión que se encuentre dentro de sus posibilidades.
De acuerdo con el portal web MujeryNegocios.com, cuando el comprador logra ver la adquisición de un par de zapatos o de cualquier otro accesorio de moda como una inversión en pro de su imagen, comenzará a optimizar el verdadero valor del gasto.
El gasto en ropa
Noticias realizó un sondeo a varias mujeres de la ciudad de Caracas para conocer cuál es el porcentaje del ingreso mensual que es invertido en ropa o cualquier otro accesorio que las haga sentirse bellas a la hora de arreglarse.
Según relató Nayibe Troconis, lo que más le gusta comprar son pantalones y camisas, para ello invierte al menos 1.500 bolívares cada dos meses.
“Lo que me gusta, lo compro”, dijo Nayibe. Sin embargo, ofreció un dato importante: “no suelo comprar mucho en centros comerciales ya que el costo es más alto”.
Por su parte, Daniela Rojas relató que -por lo menos- el 25% de su ingreso mensual está destinado a su vestimenta.
Ella considera que todo lo que una mujer gaste en ropa es una inversión. “Si vas bien vestida te prestan atención”, dijo. Daniela reconoció su afición por los zapatos y las carteras, aseverando que “inversión es igual a imagen”.
Lorena Gaitán, no difiere del resto de las chicas entrevistadas, pues, al igual que ellas invierte una buena parte de su ingreso en vestirse y verse bien.
“Gasto al menos 2.500 bolívares cada trimestre, o sencillamente cuando algo me gusta, las mujeres usualmente compramos por impulso, hay cosas que no se necesitan pero igualmente las compramos”, dijo Lorena.
Del mismo modo las hermanas Freisly y Yorgelis López, quienes a pesar de ser muy jóvenes no escapan de la vanidad femenina, aseguraron que invierten alrededor de 1.500 bolívares cada dos meses aproximadamente.
“Nos fascina comprar carteras y zapatos… aunque muchas veces también compramos por necesidad”.
Lo que quieren las chicas
Noticias, también se dispuso a dar un paseo por algunos establecimientos comerciales, y así indagar un poco más sobre cuestiones básicas: ¿Qué compran las mujeres? ¿Cuánto gastan? ¿Qué es lo que prefieren?
Adriana Ramírez, encargada de una tienda ubicada en un reconocido centro comercial de la ciudad de Caracas, argumentó que “hoy por hoy son muy escasas las mujeres que compran por impulso, ya casi no hay”.
Ramírez aseguró que lo que más buscan las mujeres son los zapatos, y que el promedio de gastos de las féminas que allí compran está alrededor de los 800 bolívares.
Por su parte, Aracelis Hernández, también encargada de un establecimiento comercial, comentó que las mujeres “siempre preguntan si hay algo más barato, actualmente se buscan muchísimo las ofertas”.
De acuerdo con Aracelis, el promedio de inversión de cada mujer que compra en su tienda varía entre 500 y 600 bolívares.
Definitivamente la mujer venezolana siempre quiere verse bien, atractiva y al mismo tiempo quiere sentirse diferente a las demás, es por eso que cada una hace lo posible por consentirse dentro de sus posibilidades.
En Caracas existen muchísimas opciones al momento de comprar ropa, hay para todos los gustos y posibilidades, sólo se requiere de un poquito de tiempo para conseguir lo que buscamos.
Lo más importante es tener siempre en cuenta el impacto que esto puede llegar a tener sobre nuestro bolsillo, por ello se debe realizar un ajuste del presupuesto para así satisfacer nuestros hábitos de consumo y a su vez nuestros objetivos de compra.