Consejos para minimizar los ronquidos

    La Fundación Nacional del Sueño establece que más de 90 millones de americanos adultos – hombres y mujeres – roncan, 37 millones de ellos de manera regular. Las causantes pueden variar. Si tu doctor ha descartado una obstrucción como apnea u otro desorden del sueño que podrían requerir cirugías, hay remedios naturales para minimizar esos molestos ronquidos.

Cuando dormimos los músculos de la garganta se relajan y se vuelven flexibles. Si existe algún tipo de bloqueo entre la punta de la nariz y las cuerdas vocales, la pared de la garganta vibra, resultando en el sonido del ronquido.

Algunos remedios alternativos son:

Canta: Investigadores británicos le asignaron a 20 roncadores hacer 20 minutos de ejercicios vocales diarios por tres meses. Más de la mitad del grupo reportó una reducción en sus ronquidos. Se piensa que el cantar mejora el control muscular del paladar y los tejidos de la garganta, lo que mantiene los ronquidos nocturnos bajo control.

Controla lo lácteos: Las comidas ricas en lácteos crean mucosidad en el cuerpo, las que pueden ser difíciles de digerir y causan debilidad a los músculos, especialmente esos en la tráquea. El exceso de mucosidad provoca alergias, gotereo nasal y ronquidos. Además, el ingerir menos lácteos puede provocar pérdida de peso, haciendo que los tejidos grasos alrededor del cuello adelgacen para ayudar a la eliminación de los ronquidos.

Consume los alimentos indicados: Algunas comidas provocan hinchazón, mientras que otras son anti inflamatorias. Ingiere frutas (excepto naranjas), vegetales (excepto maíz), granos (excepto soya), sustitutos de la leche (excepto leche de arroz y almendra) y alternativas naturales de azúcar como melaza, stevia y agave. Estos cambios alimenticios también brindarán mayor energía y hasta pérdida de peso, algunos argumentan que hasta mejoran la concentración.

Toma un batido de banana: Aún falta mayor investigación, pero una universidad australiana piensa que componentes que se encuentran en la banana ayudan a mantener abierta la garganta, lo que reduce la presión en las vías respiratorias mientras se duerme.

Cambia tu almohada: Tu problema podría resolverse de manera tan simple como encontrar la almohada correcta que eleve tu cabeza lo suficiente para que abra los pasajes nasales.