Bamari, un espacio de 4 mil 200 hectáreas, está integrada por una serie de antenas, que en su mayoría alcanzan el tamaño de pequeños edificios que controlan el tan discutido satélite Venesat-1 Simón Bolívar, que entre críticas y elogios, está cerca de cumplir 4 años llevando comodidad tecnológica a aquellas poblaciones que desconocían de este mundo.
El ingeniero en sistemas, Miguel Roballo, es el responsable de operar el novedoso aparato. Con paciencia y entusiasmo, explicaba a cada uno de los presentes el proceso de control satelital; el que se encuentra en una superficie falsa, por la que en realidad pasa una cantidad innumerable de cables, que hacen posible la supervisión de la obra, de la que se generan 6 reportes diarios, contando además con una vigilancia extrema y permanente.
Roballo junto a efectivos de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Fanb) y otros ingenieros, formados como él en la República Popular China, deben hacer vida en esta ni tan pequeña ciudad, que ahora denominan “segundo hogar”, lo que demuestra a hombres y mujeres, comprometidos con la obra que desea dibujar a Venezuela en territorio espacial.
“Además de la construcción del Centro de Investigación e Información de Tecnología Espacial, esperamos el despegue de (el satélite) Miranda”, fueron las palabras pronunciadas por Mariano Imbert, director ejecutivo de la Agencia Bolivariana para Actividades Espaciales (ABAE), quien con gran apego daba pie al esperado anuncio del lanzamiento de la nueva plataforma satelital, que llevará por nombre Miranda, la que será ejecutada a finales del mes de septiembre, con el objetivo de apoyar la toma de decisiones en materia de conservación, defensa y protección ambiental, al igual que hará más eficiente la gestión de riesgos.
También a través del director de la ABAE, fuimos informados sobre una segunda base, llamada Luepa, que desde el estado Bolívar, ofrece apoyo en caso de contingencia. Es etiquetada, sin quitarle importancia, como respaldo de la Base Aeroespacial Bolivariana Capitán Manuel Ríos.
Cantv, por su parte ha sido el encargado de la instalación de las antenas que en cada ciudad, haciendo posible el aumento en materia de telecomunicaciones, facilitando el acceso a internet, brindando a niños y adultos el derecho al conocimiento integral a nivel mundial.
Finalizando el recorrido, pudimos conocer de la mano del Capitán Parra Pulgar, los objetivos básicos de las principales antenas, que divisan en una “caja imaginaria” al Venesat-1, que hoy cuando le restan 16 años de vida útil, ha sabido llevar, principalmente una biblioteca cibernética a los rincones más remotos del país y así abrir camino a su par, la plataforma VRSS-1 Francisco de Miranda, materializando lo que hace unos años resultaba inimaginable.
Por Raylí Luján/ Noticias24
Cámara: Alex Urbina/ Noticias24
Edición del video: Alex Urbina/ Noticias24