La propuesta fue realizada este miércoles durante la inauguración del proyecto Trump Ocean Club International Hotel & Tower, de 70 pisos, el más elevado en Latinoamérica, que dispone de un área de 250.000 metros cuadrados.
Martinelli destacó que el nuevo concurso de Miss Universo coincidiría con la celebración de los 500 años del descubrimiento del Mar del Sur, los cinco siglos de evangelización en tierra firme y la programada visita oficial del papa Benedicto XVI a este país, así como la realización de congresos internacionales.
El mandatario dijo a Trump, dueño del concurso de belleza, que el Concurso Miss Universo 2013 se convertirá en un dinamizador del turismo internacional, en el que Panamá figura como un destino de visitantes en la región.
Al respecto, la Miss Universo 2002, la panameña Justine Pasek, comentó a dpa que sería un “orgullo” y “motivo de inspiración” para Panamá volver a ser anfitrión de un espectáculo universal de belleza.
Recordó que la capital panameña fue escenario de concurso mundial en 1986 y 2003, y volvería a ser la sede de un concurso para intensificar el flujo de turistas y crear una “ventana al mundo” sobre las atracciones geográficas y culturales de este país.
Pasek señaló que el concurso Miss Universo es más que el “glamour” de las beldades y ha contribuido en los últimos años a la generación de conciencia, especialmente entre los jóvenes, sobre la necesidad de prevenir y enfrentar el sida.
Las Miss Universo 2002 abogó por la solidaridad social a favor de personas enfermas e injustamente excluidas, quienes requieren ayuda humanitaria y comprensión.