Sufragio, en la Venezuela de hoy, significa sufrimiento y no participación en elección libre y democrática, ya que Tibisay Lucena a la palabra sufragio le quitó el “gio” y nos dejó el “sufra”.
En Venezuela sufragio, además de sufrimiento, también significa lucha en contra de todas las adversidades, trampas e ilegalidades que desde el gobierno, es decir, desde el CNE, quieren imponernos para aprobar una constituyente que eliminaría para siempre la posibilidad de votar en transparencia, libertad, democracia y paz.
¿Por qué una mujer inteligente y brillante, como era Tibisay cuando tocaba el violonchelo y tenía sueños bonitos, se presta para hacer imposible y peligrosa la vida de los venezolanos?
La verdad, no lo sé. Pero si me encontrara con Tibisay, con aquella otrora talentosa niña ahora adulta y malvada, le diría: La vida es corta, y sin darnos cuenta de pronto ya no está. Un día se tienen 70 demonios de la Guardia Nacional como espalderos y, a lo mejor, otro día se ruega a Dios para tener un ángel de la guarda celestial que nos quiera y nos proteja, porque el infierno y el cielo existen. El primero ya lo estamos viviendo y el segundo lo conocerán, con suerte, aquellos que cuando rindan cuentas hayan tenido la humildad, la decencia, la integridad, el valor y la conciencia de arrepentirse a tiempo de sus maldades.
Tibisay, no puedo entender cómo alguien que de joven destilaba amor, proyectos y sueños, se haya unido al elenco de esta película de terror que inmisericordemente destruye a Venezuela.
Tibisay, qué lástima que te hayas ido por ese barranco y no hayas escogido el camino de luz de Teresa Carreño, Menca de Leoni, Teresa de la Parra, la madre María de San José, la Negra Matea, Doris Wells, Sofía Ímber, Belén Lobo, Luisa Cáceres de Arismendi, Alicia Pietri de Caldera o simplemente, ¿por qué no?, el de Lila Morillo, a quien, a excepción de El Puma, todos la quieren y, además, no está destruyendo a Venezuela.
Tibisay, si sigues por el camino de la ignominia, Arturo Michelena te pintará en tu Carraca particular, es decir, detrás de las rejas del terrorífico pasillito del CNE que tanto te gusta. Recostada sobre un humilde catre de paja, con una mano en la barbilla y con el rostro afligido, derrotado, pensativo y arrepentido por lo que hoy haces con Venezuela. De fondo, para no olvidar, dibujará un retrato de tu mentor Chávez y una cadena, la misma con la que tienes prisionera la democracia de tu país.
¿Te gustó este artículo? ¿Quieres recibir notificaciones en tu correo sobre este tema?
¿Quieres emigrar?
Postulate a las ofertas de trabajo disponibles en las mejores ciudades del mundo donde mudarte a vivir y trabajar, visita:
The Best Cities to Live and Work
Comparte en tus redes sociales:
Te recomendamos leer los siguientes contenidos relacionados:
Harina precocida y otros rubros, por Isaías MárquezTensiones geopolíticas y el crudo en casi US$100, por Isaías Márquez
Transporte aéreo, un sector estratégico
Isaac Hernández, La política como producto de lujo
Nominado Maestro de Sombras como el mejor libro de comunicación política de 2024
La vuelta al nuevo curso político
Las elecciones estadounidenses bajo la sombra del intento de asesinato contra Trump,por Isidoros Karderinis
Miranda en la Independencia de EEUU por Isaías A. Márquez Díaz
EL VERANO POLÍTICO más allá del descanso por Isaac M. Hernández Álvarez
A costa de Venezuela, Guyana ofertante clave mundial de petróleo
Opciones para usuarios:
» Mide tu Velocidad de Internet aquí» Precio del Petróleo y otros Commodities:
» Precio del BITCOIN »
» Precio del DÓLAR
» Calculadora PayPal »
» Consultar el Horóscopo Diario »
» Pronóstico del Tiempo
» Cronograma de Pensiones IVSS 2024
» Buscar Noticias o Artículos
Sigue leyendo los temas más populares: